China alcanzó un nivel de categoría mundial en la construcción y administración del ferrocarril Qinghai- Tíbet, dijo ayer el ministro de Ferrocarriles Liu Zhijun.

Durante el año pasado, el ferrocarril pasó por la prueba de los cambios de estaciones y garantizó el transporte seguro, dando un gran impulso al desarrollo económico y social de la provincia noroccidental de Qinghai y la Región Autónoma del Tíbet, dijo Liu.

Técnicos y trabajadores alcanzaron un gran progreso en la construcción de vías sobre permafrost inestable, mientras que los departamentos de ferrocarriles lograron un gran avance en el tratamiento del mal de altura y contra la plaga de ratas, dijo Liu.

Los pastizales, fuentes de agua y la vida salvaje a lo largo del ferrocarril fueron bien protegidos, dijo Liu.

El ferrocarril Qinghai-Tíbet recorre 1.956 kilómetros desde Xining, capital de Qinghai, hasta Lhasa, capital del Tíbet, con el proyecto de la sección de 1.142 kilómetros entre Golmud, Qinghai, y Lhasa construido entre 2001 y 2006. La sección Xining-Golmud fue completada en 1984.

Unos 960 kilómetros de la vía se encuentran a 4.000 metros sobre el nivel del mar, mientras que 550 kilómetros corren sobre permafrost inestable que es propenso a combarse.

Las temperaturas allá arriba en la meseta Qinghai-Tíbet pueden bajar hasta menos 45 grados C en el invierno.

Cada día, un total de ocho trenes de pasajeros y dos trenes de carga corren en ambas direcciones sobre la vía del ferrocarril, que ha transportado a 2,6 millones de pasajeros y 13 millones de toneladas de carga desde julio de 2006.

(10/09/2007, Agencia de xinhua)