La capital china realizará por primera vez ejercicios de respuesta ante un atentado nuclear terrorista el próximo mes, anunció ayer el gobierno municipal.

El simulacro, organizado por el Buró Municipal de Salud Pública, cuenta con la participación de los departamentos encargados de la protección del medio ambiente, del control de enfermedades así como los bomberos, manifestó Shan Qingsheng, responsable de la oficina local para emergencias.

El ejercicio consistirá en que una "bomba sucia", cargada de explosivos y sustancias radioactivas, explote en las cercanías de un estadio olímpico en las afueras de Beijing, señaló Shan.

Los departamentos relacionados del ayuntamiento deberán reaccionar de inmediato a la explosión, mientras que los bomberos, aprovechando los detectores de radiación, deberán de abrir un paso seguro para los equipos de rescate hacia el centro de la explosión.

Los equipos médicos examinarán el nivel de la radiación, de modo que los heridos puedan recibir el tratamiento adecuado.

La base médica nacional para incidentes nucleares y radioactivos, localizada en el Tercer Hospital de la Universidad de Pekín, recibirá y tratará a los "víctimas" de la explosión, de acuerdo con la planificación del simulacro.

Zhang Shulan, subdirector del departamento clínico de la base, ha confirmado que el hospital está llevando a cabo los preparativos para los ejercicios.

Un equipo de reacción rápida, compuesto por 63 trabajadores médicos, ha sido establecido, destacó Zhang.

"En el caso de que Beijing sufriese un atentado con una ‘bomba sucia', podríamos ofrecer a más de 100 camas para posibles heridos", aseguró.

Hasta el momento los organizadores aún no han dado a conocer la hora exacta ni la locación de los ejercicios, ni el número de los participantes.

(20/06/2007, spanish.china.org.cn-Agencia de Xinhua)