Los turistas que visiten la base, sin embargo, encontrarán prácticamente vacías las salas que originalmente albergaron un laboratorio de investigación, una sala de mandos y una sala de comunicaciones telegráficas.
En la base, ahora denominada la municipalidad de Xihai, se ha construido un museo en el que se exhiben viejos telégrafos, teléfonos, maquinaria y utensilios propios de los trabajadores del centro nuclear.
La municipalidad, que el año pasado recibió 93 millones de yuanes (11,6 millones de dólares USA) del gobierno central para la conservación de la base, ha comenzado la construcción de hoteles y restaurantes para acoger a los turistas que deseen conocer los primeros pasos de China en la era nuclear.
(05/05/2007, Agencia de Xinhua)
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