En el campo político, Brasil necesita el apoyo de EEUU a su solicitud para convertirse en miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU y aumentar su influencia en el mundo, mientras EEUU espera que Brasil, como un gigante latinoamericano, desempeñe un rol importante para neutralizar la influencia del presidente Chávez en América Latina, afirmó Zhou.
En cuanto a las relaciones Venezuela-EEUU, Zhao Chongyang, investigadora asistente del mismo instituto, prevé que el gobierno de Bush adoptará una política práctica de "contacto y control" hacia la administración de Chávez, en vez de una "intervención directa" en Venezuela.
El 11 por ciento del total de petróleo importado por EEUU proviene de Venezuela, lo que influye en que EEUU no usará medios militares para derrocar el gobierno de Chávez, sostuvo Zhao.
EEUU procura realizar consultas con Venezuela sobre los temas que más le preocupan, como suministro energético, campañas contra el narcotráfico y antiterrorismo, para mostrar su disposición al diálogo y conocer las politicas de Chávez hacia EEUU, mantuvo Zhao.
Mientras tanto, EEUU intentará convencer a otros países latinoamericanos, como Brasil y Argentina, para que limiten la influencia de Chávez en el continente latinoamericano, la cual se ha ido elevando por sus políticas de cooperación económica regional con grandes países latinoamericanos, destacó Zhao.
En opinión del experto Li Jiangchun, las limitadas ayudas económicas de EEUU a América Latina no jugarán un papel tan clave como antes, puesto que con la globalización y la entrada de países asiáticos y europeos y Rusia, América Latina cuenta con múltiples opciones en vez de la única dependencia de capital y mercado de EEUU.
Además, se ha reducido la capacidad de intervención militar de EEUU en América Latina debido a sus acciones militares en otras regiones del planeta, afirmó Li.
El presidente Bush realizó una gira entre el 8 y el 14 de marzo pasado por Brasil, Uruguay, Colombia, Guatemala y México.
(30/03/2007, Agencia de Xinhua)
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