China ha desempeñado un papel crucial en pos del desarrollo global durante la cumbre del Grupo de los 20 (G20), celebrada el domingo y el lunes en la ciudad de Hangzhou, de acuerdo con las expertas argentinas Nadia Radulovich y María Cecilia Peralta.

Las analistas, cofundadoras de Asia Viewers, un equipo de especialistas dedicado a la investigación sobre temas relacionados con Asia, hablaron en entrevista con Xinhua acerca de los resultados de la XI Cumbre del G20, de los desafíos que va a enfrentar el desarrollo económico mundial tras el cónclave y del papel de Beijing durante las deliberaciones.

Las expertas, integrantes del Grupo China del Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales (CARI), uno de los principales centros de análisis del país austral, remarcaron que entre los principales desafíos a tener en cuenta a partir de ahora se encuentran la gobernabilidad y la generación de confianza en las iniciativas y políticas propuestas.

"China ha declarado que se busca desde el G20 construir una economía global innovadora, dinámica, interconectada e inclusiva; explorando nuevas formas de impulsar el desarrollo y la reforma estructural", comentaron.

Las dos expertas coincidieron en que la visión debe ser de una comunidad global: la conectividad económica y los intercambios entre los países para mejorar la gestión económica y financiera combatiendo la desigualdad y el desequilibrio y asegurar que los beneficios del crecimiento económico sean equitativos para todos los países.

En esta línea, aludieron al discurso inaugural del presidente chino, Xi Jinping, en el que abogó por terminar con la mentalidad de la Guerra Fría y la polaridad de poderes a través del diálogo, la cooperación y las estrategias de beneficio mutuo.

Es por ello, apuntaron, que el compromiso de la agenda del G20 requiere que todos los miembros se comprometan a aplicar "políticas macroeconómicas responsables y mejorar la coordinación para aumentar la sinergia de sus políticas y reducir los efectos colaterales negativos".

"Muchos se preguntan sobre el rol de China y la importancia de su economía como motor del crecimiento mundial, las reformas de apertura, el crecimiento sostenible, entre otras. El presidente Xi ha dicho que las preguntas o inquietudes son contestadas a través de la acción", expusieron las analistas.

La intención de China, señalaron, es llevar a cabo las iniciativas propuestas a través del consenso y de un plan de acción conjunto, con el país asiático participando activamente en la construcción del sistema de gobernación global y esforzándose por aportar la sabiduría china a la mejora de la gobernación global.

En ese contexto, Peralta y Radulovich destacaron que "es la primera vez que el G20 toma medidas de acción orientadas al desarrollo de los países de forma global; no solo están dirigidas a sus 20 miembros, sino a todo el mundo".

Las iniciativas a implementar son una invitación para todos y para un desarrollo común y compartido, opinaron, tras lo que enfatizaron que la misión China dentro del foro fue facilitar la transición del G20, "de un mecanismo de respuesta a la crisis a uno centrado en la gobernanza a largo plazo y que tiene como fin orientar el crecimiento económico mundial y la cooperación económica internacional".

Ambas expertas consideraron que "China busca asumir un rol rector en las altas expectativas que la cumbre generó, pero esta misión es dirigida a todos los participantes, siendo que el trabajo debe ser conjunto para maximizar logros y minimizar dificultades, generando un plan de acción y garantías institucionales que beneficien a todos".

La XI cumbre del G20 concluyó este lunes en la ciudad oriental china de Hangzhou con consensos sobre una amplia gama de temas importantes. Se adoptó un comunicado que clarifica la dirección, los objetivos y las medidas de desarrollo de la cooperación del G20, mientras que se alcanzó el Consenso de Hangzhou sobre la facilitacón del crecimiento económico global mediante medidas a largo plazo, integrales, abiertas, innovadoras e inclusivas.