El Senado de Brasil inició hoy la etapa final del proceso de "impeachment" (juicio político) contra la suspendida presidenta Dilma Rousseff, con la lectura de cuestiones de orden por parte del presidente del Supremo Tribunal Federal (STF), Ricardo Lewandowski, responsable de comandar el último tramo del proceso.

La sesión comenzó a las 09:33 tiempo local (12:33 GMT) con la presencia de apenas 28 de los 81 senadores que conforman el cuerpo legislativo.

La etapa final ocurre nueve meses después de que el juicio político fuera admitido por el entonces presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha.

Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT), fue apartada provisionalmente del ejercicio de la presidencia el 12 de mayo por 180 días, y en su lugar asumió el vicepresidente Michel Temer, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB).

En caso de que la presidenta sea destituida, Temer completará el mandato hasta fines de 2018 y Rousseff no podrá ejercer la función pública por un período de ocho años.

La etapa final del proceso de "impeachment" debe extenderse hasta los días 30 ó 31 de la próxima semana, cuando el pleno del Senado realizará la votación final que decidirá por la destitución definitiva de Rousseff o su retorno al cargo.

Tras la lectura de las cuestiones de orden, este jueves comenzará la declaración de testigos, ocho en total (dos elegidos por la acusación y seis por la defensa).

Los testigos se encuentran aislados (sin acceso a televisión, internet, teléfono o visitas) en hoteles de Brasilia a la espera del momento que serán llamados a declarar.

La acusación inscribió dos testigos, el fiscal Julio Marcelo de Oliveira, representante del Ministerio Público en el Tribunal de Cuentas de la Unión (TCU), y el auditor del TCU, Antonio Carlos Costa D'Avila.

La defensa, a su vez, presentó una lista de seis testigos, el máximo permitido.

Darán testimonio por la defensa el ex ministro de Planificación, Nelson Barbosa; el economista, Luiz Gonzaga Belluzzo; la ex secretaria de Presupuesto, Esther Dweck; y el ex secretario ejecutivo del Ministerio de Educación, Luiz Claudio Costa.

Testificarán también el ex secretario de política de Inversión, Gilson Bittencourt; y profesor de derecho de la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), Geraldo Prado.

Las declaraciones de los testigos serán tomadas individualmente, con tres minutos para preguntas de cada senador y tres minutos para las respuestas, con derecho a réplica y contrarréplica.

En el juicio político, serán necesarios los votos de dos tercios del total de 81 senadores (54 votos) para la destitución definitiva de la mandataria.

Si sus adversarios no suman ese número de votos, Rousseff será absuelta, retomará la presidencia inmediatamente y el proceso será archivado.

La mandataria es acusada del crimen de responsabilidad por haber practicado el llamado "pedaleo fiscal" (atrasos en pagos a bancos públicos) y publicado decretos de crédito suplementario sin autorización del Congreso, acciones que habrían violado la Ley de Responsabilidad Fiscal.

Una gran expectativa está puesta en los trabajos del próximo lunes 29 de agosto, dedicado al testimonio de Rousseff.

La votación definitiva puede ser realizada el martes (30 agosto) o en la madrugada del miércoles (31 agosto), aunque no existe una previsión formal para el término del juicio. F

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