Al menos 1.775 personas murieron en Brasil entre el 1 de enero y el 13 de agosto de este año víctimas del virus H1N1, conocido como gripe porcina o gripe A, divulgó hoy el Ministerio de Salud.

Según los datos difundidos, Brasil va camino de registrar la mayor cantidad de muertes por el virus desde 2009, cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la pandemia mundial por el H1N1, que ese año mató a 2.060 personas en el país sudamericano.

El estado de Sao Paulo (sureste), el más poblado de Brasil, es el que registra más muertes por el virus con 737 decesos, seguido de Paraná y Río Grande do Sul (ambos en la región sur), con 206 y 182 víctimas, respectivamente.

Las muertes por H1N1 en la nación superan este año de manera amplia las 36 registradas en 2015 y representan más de 10 veces las 163 que hubo en 2014.

En lo que va de 2016, han sido notificados 9.635 casos de síndrome respiratorio agudo grave por H1N1, una complicación de la gripe A, mientras que hubo 1.080 casos por otros tipos de influenza.

Los síntomas de la gripe porcina, un tipo de la tradicional cepa H1N1 (influenza estacional) que mutó de los cerdos a los humanos, son fiebre repentina superior a 39 grados, tos, dolor de cabeza intenso, musculares y de articulaciones, irritación de ojos y flujo nasal.

Tras el brote de H1N1, algunos estados brasileños anticiparon el calendario de distribución de vacunas, que inicialmente debía comenzar el 30 de abril, con el objetivo de proteger a 49,9 millones de personas, principalmente mujeres embarazadas, ancianos y niños.

El aumento de las muertes por complicaciones del H1N1 se produce en un momento en el que Brasil lucha también contra el aumento de casos de zika, virus transmitido por el mosquito "Aedes aegypti".

Se registra, además, cuando las autoridades del país sudamericano han relacionado el zika con el aumento de casos de microcefalia.F