En México se registran cerca de 1.000 casos de paludismo al año, cifra que es imprecisa pues los conflictos en muchos territorios palúdicos no permiten hacer una estimación real, advirtió hoy el profesor de la Facultad de Medicina, Filiberto Malagón.
En el marco del Día Mundial del Paludismo, Malagón dijo que "a nivel nacional hay registro de alrededor de 1.000 enfermos al año, pero es imposible dar una cifra exacta de los infectados, pues muchas demarcaciones están dominadas por el narcotráfico y el crimen organizado, donde las brigadas de salud no pueden ingresar con libertad".
Indicó que diagnosticar el paludismo es difícil porque es causado por un parásito que, al circular por la sangre, entra en contacto con todos los órganos y como cada uno de ellos emite señales clínicas, éstas pueden diferir según el individuo y hacer que el padecimiento sea confundido con otra enfermedad.
Sin embargo, dijo el especialista, hay ciertos signos y síntomas que, al presentarse, pueden guiar la diagnosis, como la fiebre periódica de 48 o 72 horas, la esplenomegalia y los componentes del paroxismo malario.
En México el paludismo se localiza principalmente en las costas del Pacífico, de Sonora a Chiapas, incluido Oaxaca, históricamente el estado con más incidencia.
Es transmitido mediante la picadura de mosquitos anofelinos y común en zonas tropicales. Es generado por protozoarios del género Plasmodium de cinco especies: P. vivax, P. falciparum, P. malariae, P. ovale y P. knowlesi. La infección más peligrosa es la de P. falciparum, pues puede llevar a la muerte, pero si las otras se complican también son letales, apuntó el investigador.