Alrededor de 7.000 personas que buscan asilo han pasado en tren por la capital austríaca en las últimas 24 horas, confirmaron el martes las autoridades policíacas del país.
De acuerdo con las gestiones del Ministerio del Interior, no se realizaron inspecciones a los pasajeros de los trenes procedentes de Hungría y se les permitió viajar sin trabas, explicó un portavoz policial.
Por el momento, añadió, se desconoce cuándo y dónde tendrán lugar las inspecciones.
Según se ha informado, Hungría no ha evitado, al menos en su mayoría, los viajes de estas personas aunque la policía austríaca está redoblando los controles para atrapar a posibles traficantes de seres humanos en las carreteras.
Sólo 66 de los 7.000 exilados han solicitado asilo en Austria y la vasta mayoría continúa su camino hacia Alemania.
Las cifras de desplazamientos siguen aumentando y, de acuerdo con la policía austríaca, "constantemente llegan y salen trenes con más personas que buscan asilo".