Las Fuerzas Armadas brasileñas ratificaron hoy el Programa de Desarrollo de Submarinos (Prosub) con Francia, país con el que pretenden construir varios sumergibles, entre ellos uno de nuclear que permitirá a Brasil pasar a formar parte del selecto grupo de países que tienen esa tecnología, pese a los duros recortes en el presupuesto del Gobierno.
"Existe una necesidad estratégica de desarrollar y dominar la energía nuclear y realizar iniciativas que exijan independencia tecnológica de la misma", aseguró hoy en un foro de defensa en Sao Paulo el contraalmirante Sydney dos Santos Neves, gerente del Proyecto Modular de Obtención de Submarinos Convencionales de la Marina de Brasil.
En 2008, los Gobiernos de Brasil y Francia firmaron un acuerdo de cooperación militar que incluía la construcción de submarinos convencionales y de un submarino de propulsión nuclear, cuya finalización debe estar pronta en 2025.
Recientemente, el Gobierno brasileño anunció severos cortes de más de 23.000 millones de dólares en el presupuesto nacional, donde el Ministerio de Defensa era uno de los más afectados, aunque la construcción de los submarinos continuará en marcha pese a ello.
Neves destacó que el índice de participación nacional en los componentes del proyecto lo aportan 600 empresas, con un presupuesto estimado del mismo es 6.700 millones de euros (unos 7.236 millones de dólares), explicó Neves.
En el mismo acto, el brigadier Mauricio Pazini Brandao, profesor del Instituto de Tecnología de Aeronáutica (ITA), explicó que "para el desarrollo de la industria militar, la formación de recursos humanos especializados, dualidad civil-militar y uso pacífico del espacio aéreo son puntos básicos de las políticas del sector aeroespacial". F