La guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) anunció hoy que sobre la medianoche de este sábado iniciará un cese del fuego unilateral e indefinido, en momentos en que ese grupo rebelde aumentó sus ataques contra la infraestructura del país y contra las autoridades.

"Medimos la reacción inmediata del presidente (Juan Manuel) Santos como una manera de irse acercando al tema, no obstante su aparente cuestionamiento a una medida eminentemente altruista y necesaria que nadie sensato podría rechazar, menos condenar. Cabe anotar que nuestra decisión no es el regalo de una rosa llena de espinas, sino un gesto colmado de humanidad en respuesta al clamor generalizado de las víctimas del conflicto y la expectativa nacional", expresó.

Los insurgentes señalaron en un comunicado, firmado por la comandancia de esa agrupación, que están interesados en concretar la pacificación con el gobierno del presidente Santos.

"Le pedimos, señor presidente, que se empine, mire al horizonte, y descubra el nuevo mañana. Lo invitamos a que crea en usted mismo; algo que sin duda es necesario para culminar el proceso ya iniciado", comentaron los jefes insurgentes.

El cese del fuego unilateral e indefinido se inició desde medianoche de este sábado y será de manera indefinida.

Por su lado, el presidente Santos, lamentó el fallecimiento de cinco militares que fueron emboscados por guerrilleros de las FARC, al tiempo que destacó el cese al fuego que iniciarán los rebeldes.

"Quisiera comenzar lamentando la muerte en combate de cinco de nuestros héroes de la Patria, soldados de nuestro Ejército esta mañana en el Cauca. Murieron defendiendo la seguridad del resto de los colombianos. Estos cinco soldados, estos cinco héroes cayeron cumpliendo con su deber", sostuvo el mandatario desde el municipio de Itagüí.

Los rebeldes atacaron a un convoy militar que estaba transitando por una zona rural del departamento de Cauca (suroeste), donde siete militares resultaron heridos.

El jefe de Estado envió sus condolencias a los familiares de las víctimas y confió que pronto se concrete la paz con el grupo rebelde de las FARC, cuyas negociaciones se realizan en La Habana, Cuba.

"Esa es la guerra que yo quiero terminar. Le agradezco mucho, querido Alcalde, su apoyo a este proceso que, como usted bien dice, ha sido difícil e incomprendido. Pero es lo mejor que le puede pasar a Colombia: terminar esta fábrica de víctimas; terminar este desangre de más de 50 años", agregó el jefe de Estado.

Entretanto, el jefe negociador del gobierno colombiano en el proceso de paz, Humberto de la Calle, lamentó la muerte de los militares y policías y confió que esa situación no se repita nuevamente una vez concretada la paz.

"En el día de hoy tenemos que lamentar la muerte de varios uniformados por acciones de la guerrilla. Al enviar nuestro mensaje de condolencia a sus familiares y a los miembros de las Fuerzas Armadas, tenemos que reiterar que el propósito de las conversaciones es que esto no se repita", señaló.

"La razón de ser de la Mesa de Conversaciones es el fin de la guerra. Como ha dicho el presidente Santos, el corazón del proceso son las víctimas. Las que ya han sufrido pero también las que tenemos el deber moral de evitar", agregó el funcionario.

Las FARC señalaron, el miércoles pasado, que aspiraban "contar con la veeduría de Unasur, CELAC, el CICR, y el Frente Amplio por la Paz".

El proceso de paz entre el gobierno colombiano y las FARC se inició hace dos años y las negociaciones se realizan en La Habana, Cuba.