La política de "mano dura" y "súper mano dura" contra la violencia y el crimen organizado que se ha aplicado en los últimos años en El Salvador y en otros países de la región centroamericana ha fracasado, dijo hoy en Managua, el ministro de seguridad de esa nación, Benito Antonio Lara.
El funcionario salvadoreño que llegó a Managua para fortalecer lazos bilaterales entre ambas naciones y conocer la experiencia nicaragüense en materia de seguridad, reconoció que su país busca alternativas para reemplazar la política "mano dura" que no tuvo los resultados esperados.
Indicó que en ese sentido, es importante para El Salvador conocer experiencias exitosas de países hermanos como Nicaragua, que desarrolla una política de seguridad altamente preventiva y ligada a la participación activa de las comunidades.
"Queremos analizar la experiencia nicaragüense y analizar qué podemos aplicar en nuestro país, particularmente hemos participado en un encuentro de los poderes municipales que participan activamente en el diseño de planes de seguridad y ciudadanía", apuntaló.
El martes pasado, el gobierno de Estados Unidos anunció que apoyará financieramente el "Plan de la Alianza para la Prosperidad del Triángulo Norte"en Guatemala, El Salvador y Honduras que busca combatir algunas lacras sociales.
Países como Guatemala, El Salvador y Honduras han diseñado el "Plan de la Alianza para la Prosperidad del Triángulo del Norte", elaborado conjuntamente por Honduras, El Salvador y Guatemala para reforzar sus instituciones, fortalecer la seguridad ciudadana, combatir el crimen organizado y atraer inversión extranjera.
Estados Unidos calcula que necesitará unos 5.000 millones de dólares a lo largo de cinco años para implementar su estrategia de fortalecimiento de la institucionalidad y la seguridad en los países del triángulo norte de Centroamérica, considerado, una de las zonas más violentas del mundo. F