Oficiales de Estados Unidos y Corea del Sur decidieron realizar la transferencia del control operativo en tiempos de guerra (OPCON) a Corea del Sur sobre la base de condiciones, en lugar de fijar un plazo de tiempo, reveló este viernes Curtis Scaparrotti, jefe del Comando de las Fuerzas Combinadas en Seúl.

Durante una rueda de prensa en el Pentágono tras la Reunión Consultiva de Seguridad y la Reunión Consultiva Militar celebradas en Washington el jueves y el viernes, el general manifestó sentirse alentado por la firma del memorando de entendimiento sobre la transferencia del OPCON de las fuerzas surcoreanas de Washington a Seúl.

"La decisión bilateral para la transición del OPCON supeditada a condiciones garantizará que nuestra postura de defensa combinada permanezca fuerte y firme, mientras que la República de Corea desarrolla o adquiere las cruciales capacidades militares necesarias para asumir la dirección en la defensa combinada de Corea del Sur", apuntó Scaparrotti.

Según un acuerdo alcanzado por Corea del Sur y EEUU en 2010, Washington debería transferir el OPCON a Seúl el 1 de diciembre de 2015. Alrededor de 28.500 soldados estadounidenses están estacionados en el país asiático.

La actual decisión significa que un general estadounidense continuará al frente del Comando de las Fuerzas Combinadas en Seúl y EEUU mantendrá su papel de liderazgo en tiempos de guerra hasta que la alianza considere que las condiciones son propicias para una transición estable del OPCON.

"EEUU y la República de Corea acuerdan mantener de manera temporal las capacidades de combate en Seúl y al norte del río Han, fundamentales para la defensa de la República de Corea", señaló el general.

Según el acuerdo, la 210ª Brigada de Artillería de Campo de EEUU se mantendrá en la zona septentrional hasta que Corea del Sur alcance una capacidad comparable, añadió Scaparrotti.

Aún así, la vasta mayoría de los acuerdos de la relocalización de las fuerzas estadounidenses continuará según lo planeado, agregó.