El presidente chino, Xi Jinping, concluyó este miércoles su visita a Cuba, última parada de su gira por cuatro naciones latinoamericanas, la cual ha servido para fortalecer las relaciones entre China y los países visitados, así como entre China y el resto de América Latina.
Del 17 al 23 de julio, el presidente Xi realizó visitas de Estado a Brasil, Argentina, Venezuela y Cuba, tras participar en la VI Cumbre de Líderes de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), celebrada en la ciudad brasileña de Fortaleza.
En la gira, considerada histórica y trascendental para el desarrollo y fortalecimiento de las relaciones entre China y América Latina y el Caribe, el presidente chino cumplió con una agenda de intensidad inédita, destinada a reforzar la amistad, la cooperación económica y los lazos políticos.
Como principal fruto del periplo, se firmaron más de 100 acuerdos de cooperación entre China y esos cuatro países, y se elevaron las relaciones sino-argentinas de asociación estratégica a asociación estratégica integral, y las sino-venezolanas de asociación estratégica para el desarrollo común a asociación estratégica integral.
En el marco de la gira, el presidente chino también se reunió con mandatarios de 11 países de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), ocasión que aprovechó para exponer la política exterior de China hacia la región y formular propuestas para afianzar la cooperación entre ambas partes.
Xi también asistió a un encuentro entre líderes del grupo de los principales países emergentes y mandatarios de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), en Brasilia.
FORTALECIMIENTO DE RELACIONES BILATERALES Y FRUCTIFEROS RESULTADOS
Durante un discurso pronunciado en el Congreso Nacional de Brasil, el presidente Xi afirmó que China está dispuesta a hacer esfuerzos conjuntos con Brasil y otras naciones latinoamericanas y caribeñas para fomentar una asociación de cooperación estratégica integral caracterizada por la igualdad, el beneficio mutuo y el desarrollo común.
En la reunión China-CELAC, celebrada el 17 de julio en Brasilia, Xi propuso un esquema 1+3+6, es decir, "un plan, tres motores y seis campos", para profundizar la cooperación entre ambas partes.
"Un plan" se refiere a la elaboración de un Plan de Cooperación entre China, América Latina y el Caribe para 2015-2019, con el fin de lograr el crecimiento inclusivo y el desarrollo sostenible.
"Tres motores" se refiere al comercio, las inversiones y las finanzas, con los cuales se promueve el desarrollo integral de la cooperación práctica entre ambas partes y se pretende elevar, en un margen de 10 años, el volumen del intercambio comercial a los 500.000 millones de dólares anuales, frente a los 261.600 millones de dólares de 2013.
Asimismo, China estimulará la inversión de más empresas en la región, con la expectativa de aumentar las inversiones acumuladas hasta los 250.000 millones de dólares en el mismo plazo.
"Seis campos" se refiere a la energía, la construcción de infraestructuras, la agricultura, la manufactura, la innovación tecnológica y la tecnología de la información, sectores en los cuales se hará hincapié para lograr un mayor desarrollo de la cooperación de beneficio mutuo entre China y América Latina.
En el encuentro, también se oficializó el establecimiento de un foro de cooperación China-CELAC, cuya primera reunión ministerial se celebrará a comienzos del próximo año en Beijing.
Durante su visita a Brasil, los dos países se comprometieron a profundizar aún más la asociación estratégica integral y firmaron un total de 56 acuerdos de cooperación, entre ellos la adquisición china de 60 aviones E190 de la fabricante brasileña Embraer.
En Buenos Aires, Xi y su homóloga argentina, Cristina Fernández, acordaron elevar las relaciones bilaterales hasta el nivel de asociación estratégica integral.
Entre los acuerdos firmados destacan los de financiamiento para la construcción de dos represas hidroeléctricas, otro para renovar la red ferroviaria Belgrano Cargas y el de los bancos centrales de ambas naciones, que permitirá generar estabilidad en el flujo de reservas de Argentina.
En Caracas, China y Venezuela decidieron elevar sus relaciones bilaterales al nivel de asociación estratégica integral. En 2001, los dos países forjaron una asociación estratégica para el desarrollo común, iniciando un periodo de desarrollo rápido y fructífero de las relaciones bilaterales.
Durante la visita de Xi, ambas partes firmaron un total de 16 acuerdos que cubren áreas como energía y minería, finanzas, construcción de infraestructuras, agricultura y alta tecnología.
En La Habana, el presidente chino, Xi Jinping, y su homólogo cubano, Raúl Castro, prometieron que los dos países serán amigos firmes a largo plazo y socios en la búsqueda de cooperación recíproca.
"Profundizaremos con resolución nuestra amistad y nos trataremos con sinceridad, llevando a cabo una cooperación de beneficio mutuo y forjando nuestra asociación en la reforma y el desarrollo", dijo Xi durante sus conversaciones con Castro, presidente del Consejo de Estado y el Consejo de Ministros de Cuba.
Por su parte, Castro indicó que las relaciones bilaterales se encuentran en el mejor momento en la historia, ya que la cooperación ha sido expandida a diversas áreas.
Ambas partes firmaron una serie de acuerdos de cooperación en ámbitos como economía y comercio, agricultura, energía, minería, finanzas, biotecnología, telecomunicaciones, construcción de infraestructuras, sanidad, cultura y educación.
UNA GIRA HISTORICA Y TRASCENDENTAL
Líderes políticos y expertos de los países de América Latina coincidieron en el saldo muy positivo que dejó la gira del presidente de China, Xi Jinping.
Repasando los acuerdos alcanzados durante la visita del mandatario chino, la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, señaló que "tuvimos una serie de acuerdos que estaban siendo gestados a lo largo de este período, y que ya han sido concretados".
Rousseff destacó el interés chino en los procesos de concesión de infraestructuras y logística en Brasil, en áreas como las comunicaciones, la minería, la energía, la defensa, la ciencia y la tecnología, y la investigación espacial, como sectores estratégicos de la relación de Brasil con el país asiático.
Por su parte, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo del encuentro China-CELAC que había sido "una reunión extraordinaria de diálogo, de trabajo, de acción, con resultados concretos" que redundarán en beneficios mutuos.
"En esencia, todo tuvo una gran carga de cooperación, de trabajo, de desarrollo compartido, de ganancia compartida, que es la base de un mundo de paz, relaciones de respeto, entre un gigante del mundo, una potencia como China, y nosotros, América Latina y el Caribe, que vamos transitando el camino para convertirnos todos juntos en una región potencia", señaló.
En el mismo sentido, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, resaltó la creciente importancia para todos los países latinoamericanos y las perspectivas favorables que plantea el nuevo escenario con la ampliación de los lazos económicos y políticos con China.
"China es un país muy importante para todos los países de América Latina y muchos de ellos incrementaron, así como Colombia, un fortísimo comercio con China. Claro que nos interesa seguir incrementando ese comercio, esas negociaciones. Eso es parte de lo que está previsto en esta Cumbre", afirmó.
Para Enrique Dussel Peters, profesor de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), las perspectivas de la relación son buenas y "de máximo interés por ambas partes".
La visita del mandatario chino "refleja la creciente y efectiva relevancia de América Latina y el Caribe para China, tanto en el ámbito político como económico y global", dijo.
La gira del presidente chino por América Latina, que incluyó Brasil, Argentina, Venezuela y Cuba, así como la que realizó en 2013 por Trinidad y Tobago, Costa Rica y México "es una muestra clara de que la relación entre China y América Latina surca nuevas aguas", indicó Luis Alberto Moreno, presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Expresó, en vísperas de la gira del presidente chino, que "esta nueva visita del presidente Xi también indica que la relación entre China y América Latina dejará de ser exclusivamente comercial".
El líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, expresó en su artículo "Es hora de conocer un poco más la realidad" que el periplo del presidente chino Xi Jinping por América Latina y el que realizó en fecha reciente su homólogo ruso Vladimir Putin constituyen "proezas".
"No albergo la menor duda de que cuando el presidente Xi Jinping culmine las actividades para cumplimentar su gira en este hemisferio, al igual que el presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin, ambos países estarán culminando una de las proezas más grandes de la historia humana", apuntó.
Tras indicar que el aporte que Rusia y China pueden realizar a la ciencia, la tecnología y el desarrollo económico de Suramérica y el Caribe es "decisivo", acotó que "hoy lo que se valora es lo que sucederá en nuestro planeta globalizado en un futuro próximo".
El académico argentino Damián Patcher, especializado en relaciones internacionales, subrayó que "existe una aceleración importantísima en las relaciones entre China y América Latina".