Los países del grupo BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) deben superar las asimetrías entre ellos para avanzar en la cooperación y alcanzar el éxito en su camino conjunto por el crecimiento, afirmaron expertos brasileños a Xinhua.
De acuerdo con Leonardo Valente, profesor de la Universidad Federal de Río de Janeiro y coordinador del Laboratorio de Estudios Asiáticos de esa casa de estudios, aunque los BRICS pueden tener objetivos comunes, son un grupo mixto, y algunas economías son más fuertes que las otras.
"China tiene una economía muy poderosa, ya está en otro nivel, al ser de la segunda economía del mundo, y la primera cuando se trata de hacer negocios. Es una economía de alto desarrollo tecnológico", subrayó.
Elias Jabbour, investigador de la Fundación Mauricio Grabois y autor de dos libros sobre el desarrollo y la infraestructura china, va más allá, considerando a China como el centro del grupo.
"China es el centro neurálgico, corazón y mente de los BRICS. Brasil es el eslabón débil, con una gran fragilidad ideológica interna", señaló.
Ambos expertos creen que las asimetrías internas del grupo deben ser mitigadas para avanzar en la integración de los BRICS.
Según Valente, las economías de los BRICS son dinámicas y pueden convertirse en un polo importante en la economía global, superando inclusive a las alianzas del Norte, si los países miembros consiguen reducir las desigualdades en el grupo.
"Economías como China, que ya está en otro nivel de desarrollo, necesitan un mayor intercambio con países que tienen un gran potencial, como Brasil, pero que no alcanzaron aún ese nivel tecnológico, para prevenir el aumento de esas asimetrías", consideró.
Para él, con el fin de superar esas asimetrías, es esencial que los BRICS diversifiquen su comercio y aseguren que los países del grupo interconecten sus economías.
Tanto Valente como Jabbor creen que la idea de utilizar una moneda común para el intercambio entre los miembros sería un paso excelente.
"Dejar de utilizar el dólar estadounidense para las transacciones financieras entre esos países es algo muy interesante, y avanzar en el Banco de Desarrollo de los BRICS más allá de la fase de proyecto es aún más estratégico, en vista de que las instituciones nacidas en Bretton Woods, el FMI (Fondo Monetario Internacional) y el Banco Mundial, continuarán sufriendo una muerte lenta", apuntó Jabbour.
Es esencial que los cincos países cooperen en los campos de ciencia y tecnología y educación, señaló Valente.
Según él, son necesarias más relaciones entre las universidades de los países miembros, así como estímulos al intercambio de estudiantes e investigadores, para romper barreras y aumentar el conocimiento entre los países.
"Una buena parte del intercambio de conocimiento entre los países del BRICS ocurre a través de Europa y los Estados Unidos. Un intercambio más directo debería ser promovido", dijo.
La integración en otras áreas, como finanzas, comercio, infraestructura, logística, defensa e innovación es también considerada esencial.
"Los países BRICS deben construir una infraestructura logística común, para facilitar la integración de sus economías. Eso significa integración en campos como puertos, navegación, aeropuertos. Es extremadamente importante", afirmó.
A pesar del carácter diverso de los países BRICS, Valente cree que el grupo es sólido y tiene todas las condiciones para fortalecer su influencia y participación en el escenario global.
En Brasil, destacó, la agenda BRICS ya es una agenda de Estado, más allá de las preferencias o políticas de una administración, lo que significa que no habrá cambios con la próxima elección presidencial, prevista para octubre.
"Cualquiera sea el resultado de las elecciones, esta es una agenda de Estado. Brasil está interesado y preparado para mantener y profundizar los vínculos con los países del BRICS. La posibilidad de desintegración del grupo es remota", apuntó.
Jabbour concuerda que ninguno de los BRICS tiene ningún interés en interrumpir la cooperación, por lo que el grupo continuará existiendo, aunque tiene una opinión diferente sobre el nivel del compromiso de Brasil.
Según él, el resultado de la elección presidencial puede provocar un giro, en función de que la victoria del candidato opositor Aecio Neves podría exacerbar la fragilidad interna de Brasil.
"Veo grandes problemas políticos en Brasil. No hay un consenso en la sociedad brasileña sobre las ventajas del país en mantener esta política externa seria iniciada en 2003", afirmó Jabbour, y agregó que algunos "quieren que el FMI vuelva a dar órdenes al país".
Por otra parte, señaló, los BRICS deben encontrar una agenda estratégica común que contemple los intereses de largo plazo de los países miembros, superando diferencias internas de opinión.
Pero si los países consiguen promover el diálogo y definir posiciones comunes en las esferas multilaterales, los BRICS pueden aumentar la importancia del grupo en la toma de decisiones global, observó Valente.
"En el grupo hay dos países que son miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, y que son vitales para mantener la estabilidad internacional, y dos que tienen una gran influencia diplomática. La unión de esos dos lados pueden resultar en un bloque no tradicionalmente occidental con un gran peso para mantener la paz y la seguridad", afirmó. F