Un organismo regulador nuclear respaldado por la ONU confirmó que no detectó ninguna explosión o accidente relacionado con la desaparición del avión malayo, dijo hoy a los reporteros un vocero de la ONU en la sede de la organización.
"En relación con el avión desaparecido de Malaysian Airlines, la Organización del Tratado para la Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (OTPCEN), con sede en Viena, confirmó el fin de semana que ni una explosión ni un accidente de avión en tierra o agua han sido detectados hasta ahora", indicó Stephane Dujarric, vocero del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, en la conferencia de prensa diaria.
El avión, que realizaba el vuelo MH370 con 239 pasajeros a bordo, desapareció en las primeras horas del 8 de marzo cuando se dirigía de Kuala Lumpur a Beijing. La búsqueda del avión desaparecido ahora se ha ampliado a los hemisferios norte y sur.
Aprobada el 10 de septiembre de 1996 por la Asamblea General de la ONU, la OTPCEN es una organización internacional creada para promover el Tratado para la Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares, el cual prohíbe las explosiones para pruebas nucleares. La organización opera un sistema de monitoreo mundial que recopila señales acústicas y sísmicas.
Por lo tanto, los accidentes de avión, si los hay, podrían ser detectados por el Sistema de Monitoreo Internacional de la OTPCEN, dijo Dujarric. "Este sistema de verificación fue puesto en marcha con el fin de detectar explosiones nucleares, pero también es capaz de detectar la explosión de una aeronave más grande, así como su impacto en tierra o agua".
El vocero observó que el secretario ejecutivo de la OTPCEN, Lassina Zerbo, mencionó esta posibilidad y dijo que pondrá a trabajar los sensores de la organización.
Zerbo "también alentó a todos los científicos de los Estados miembros a estudiar con cuidado la información disponible", agregó Dujarric.
En el pasado, las estaciones de la OTPCEN han detectado algunos accidentes de avión, incluyendo el accidente de un avión ocurrido en marzo de 2009 en el aeropuerto de Narita, en Japón. Fi