El balneario de Varadero, el más famoso de Cuba, pierde cada año entre 70 centímetros y un metro de línea costera debido a la erosión provocada por la elevación del nivel del mar, destacó hoy un reporte que cita al Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente
Ante esta situación, dice la fuente, Cuba desarrolla programas y estudios para conocer la vulnerabilidad de riesgo de esas áreas y adoptar medidas concretas, como la prohibición de construcciones sobre las dunas de arena.
Según estos datos, el primer polo turístico de sol y playas del país antillano tiene pérdidas anuales de 40.000 a 50.000 metros cúbicos de arena debido a la erosión en la península de Icacos, Matanzas, cuya costa retrocede a un ritmo de 70 centímetros y hasta un metro por año.
En pos de preservar esta playa, que destaca por la transparencia de sus aguas, instituciones de los ministerios de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, y de Turismo, realizar acciones conjuntas para el manejo sostenible del balneario.
Cifras oficiales de 2012 indican que la erosión está presente en cerca del 84 por ciento de las playas del archipiélago cubano, el cual tiene unos 4.000 kilómetros de costas.
Varias playas cubanas ya desaparecieron, como Cajío, en el occidente del país, y se calcula que otras 413 muestran algún indicio de erosión, con un ritmo de retroceso de la línea de costa estimado en 1,2 metros por año.
Entre las soluciones aplicadas para proteger estos balnearios está el suministro artificial de arena en los litorales afectados.
Varadero, que acoge a más de un millón de turistas al año, ha recibido desde 1987 casi 2,9 millones de metros cúbicos de arena en diversas partes afectadas a lo largo de sus 20 kilómetros de costa. Fi