El gobierno español aprobó hoy una nueva ley de aborto que hará mucho más difícil a las mujeres poder abortar en este país.

El ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, confirmó en la tradicional conferencia de prensa de la cartera que la nueva ley, la cual es muy probable que sea aprobada en el congreso dado que el gobernante Partido Popular de derecha cuenta con una cómoda mayoría, pone fin al derecho de las mujeres de solicitar un aborto dentro de las primeras 14 semanas de su embarazo.

La ley también elimia el derecho a abortar si se muestra que el feto tendrá malformaciones y reduce a sólo dos las razones por las que una mujer puede pedir abortar: si su salud corre peligro en caso de continuar con el embarazo o si está embarazada como resultado de una violación.

Con el fin de demostrar que la salud de la mujer está en riesgo, deberá presentar un documento firmado por dos especialistas que muestre que, en efecto, se trata de este caso.

Este es un radical endurecimiento de la ley actual, la cual permite abortar sin restricciones hasta la catorceava semana de embarazo y hasta las 22 semanas si el feto muestra malformaciones serias.

Por otra parte, las chicas de 16 y 17 años de edad necesitarán el permiso de sus padres o tutores para poder proceder con el aborto, algo que el anterior gobierno socialista había eliminado en 2010.

Gallardón dijo que la nueva ley ofrecerá una "defensa tanto para la protección de la vida del niño aún no nacido como de los derechos de las mujeres".

El ministro insistió en que la ley "siempre actuará en favor del interés de las mujeres", quienes no serán penalizadas si se les practica un aborto.

Grupos opositores y de defensa de los derechos de las mujeres expresaron un gran desacuerdo respecto de la posición del gobierno y los defensores de la libertad de elección dijeron que la nueva ley hará retroceder 30 años los derechos de las mujeres en España, a como eran a mediados de la década de los ochenta. De hecho, la nueva ley es más restrictiva que la ley de aborto aprobada en España en 1985.

Por otra parte, Elena Valenciano, subjefa del opositor Partido Socialista, pidió que aquellos que estén en contra de la nueva ley expresen su oposición y "movilicen a la sociedad contra lo que va a ser una reducción de la libertad de las mujeres que es imposible de entender". Fi