La Organización Internacional de Trabajo (OIT) instó hoy martes en Lima, Perú, a mejorar la calidad de los empleos en América Latina y el Caribe, durante las presentación de un informe sobre el panorama que enfrenta la región.
La tasa de desempleo urbano de América Latina y El Caribe alcanzó mínimos históricos este 2013, al ubicarse en 6,3 por ciento, con una tendencia a continuar igual en 2014, pero el desafío ahora es mejorar la calidad de los empleos, indicó el organismo.
El panorama laboral de este año refleja que la tasa de desempleo urbano promedio para la región bajó una decena de punto porcentual, al quedar en 6,3 por ciento, en un contexto de desaceleración del crecimiento económico (3,2 por ciento).
La situación del mercado laboral regional no es negativa en términos generales, pues el bajo desempleo siempre es una buena noticia, subrayó la directora regional de la OIT para América Latina y El Caribe, Elizabeth Tinoco, al recordar que hace 10 años la tasa de desempleo urbano era de dos dígitos (11,1 por ciento).
Sin embargo, Tinoco consideró preocupante la situación, debido a que los salarios crecieron menos que en años anteriores, apenas 1 por ciento este año, por debajo del 2,6 por ciento del anterior.
La informalidad laboral se mantuvo en 47,7 por ciento, en tanto que la productividad aumentó en América Latina y el Caribe por debajo del promedio mundial, y creció la desocupación de jóvenes en zonas urbanas, al alcanzar 6 millones 600.000 el número de desempleados.
La OIT señaló que para mantener la tasa de desocupados por debajo de 7 por ciento, deben crearse en la región al menos 43 millones 500.000 nuevos puestos de trabajo hasta 2023.
En la actualidad, unos 15 millones de personas están desempleadas.
En tanto, la tasa de participación laboral de las mujeres aumentó levemente y alcanzó por primera vez el 50 por ciento en el promedio regional.
Tinoco dijo que la actual situación laboral es desafiante, por lo cual instó a redoblar esfuerzos para mejorar la cantidad y calidad de los empleos como componente fundamental del crecimiento, a fortalecer el mercado interno y crear ambiente propicio para el desarrollo productivo.
En ese sentido, la OIT recomendó políticas destinadas a vitalizar empresas sostenibles que produzcan y promuevan empleo formal.
De igual forma, instó a reforzar la institucionalidad laboral y el diálogo social, diseñar y aplicar políticas activas del mercado de trabajo, mejorar la educación y la formación para el trabajo, promover la formalización tanto de empresas como de relaciones laborales y aplicar políticas orientadas a aumentar la productividad.
"No podemos olvidar que el empleo constituye una herramienta esencial para la redistribución de la riqueza y la inclusión social, para la lucha contra la pobreza y la desigualdad", remarcó la directora regional de la OIT para América Latina y El Caribe. Fi