Una mujer estadounidense, madre de tres niños, adoptó a Theo, un cachorro que inmediatamente se transformó en un amigo inseparable de su hijo más pequeño, Beau. Cada día el perro espera a la hora de la siesta del niño para acompañarlo a pata suelta, y las imágenes, publicadas por la mujer en las redes sociales, enternecen a millones de internautas.