China dio la bienvenida a la aprobación de una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) sobre Siria, decisión que elogió como reflejo de la unidad del Consejo.

El CSNU votó el viernes por unanimidad la aprobación de la resolución 2118 diseñada para privar a Siria de armas químicas.

La votación se llevó a cabo después que la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ), una agencia internacional encargada de supervisar las armas de esta índole, estuviera de acuerdo en un plan para destruir el arsenal químico de Siria para mediados de 2014 como fecha límite.

"Nos anima mucho ver que el Consejo de Seguridad ha acabado de aprobar unánimemente la resolución 2118, con lo cual la situación de Siria regresa a la vía pacífica luego de estar al borde de la guerra, ofreciendo una nueva oportunidad a los esfuerzos por encontrar una solución política al tema sirio", declaró ante el CSNU el ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, luego de la votación.

"Es la primera vez en más de un año que el Consejo de Seguridad emprende una acción conjunta con respecto a este tema", añadió.

"Mientras gestiona el asunto de Siria, el Consejo de Seguridad debe tener en mente los propósitos y principios de la Carta de la ONU, actuar con un sentido de responsabilidad ante el pueblo sirio, el mundo y la historia, y garantizar que cualquier decisión que tome pueda superar las pruebas de la historia", acotó el canciller chino.

Wang indicó además que China ve con buenos ojos el hecho de que el gobierno sirio se haya unido hace poco a la Convención sobre las Armas Químicas.

"La resolución 2118 estipula todos los objetivos de la destrucción de armas químicas en Siria, así como la hoja de ruta para la tarea de seguimiento", explicó.

"Esperamos que las partes implicadas mantengan una cooperación estrecha, cumplan con sus responsabilidades y pongan en práctica la decisión de la OPAQ y la resolución del CSNU de manera integral y adecuada, para lograr, al fin, una solución oportuna a la cuestión de las armas químicas en Siria", subrayó Wang.

El jefe de la diplomacia china recalcó que ni Siria ni la región de Medio Oriente podrían soportar otra guerra, por lo que una solución política es la única vía para salir de la crisis.

Wang pidió un alto el fuego y el cese de la violencia en Siria tan pronto como sea posible, así como implementar esfuerzos destinados a poner fin a la crisis mediante el diálogo y reconstruir los hogares para el pueblo sirio.

China espera que la comunidad internacional alcance un consenso y promueva la pronta convocatoria de la conferencia de Ginebra II, señaló.

Como miembro permanente del CSNU, China está lista para trabajar junto con todas las partes para lograr, mediante esfuerzos infatigables, una solución integral, oportuna y duradera para la situación de Siria, concluyó.

Luego de la sesión, Wang también informó a la prensa en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York sobre la postura del gobierno chino en torno a la crisis de Siria.