(SPANISH.CHINA.ORG.CN) – Consternada, a la vez que en calma, vivía Venezuela las horas siguientes a la noticia del fallecimiento del presidente Hugo Chávez, cuyos restos serán expuestos durante tres días en capilla ardiente, antes de recibir sepultura, en un lugar aún por determinar, el próximo viernes.

Mientras los medios de comunicación venezolanos y el propio Gobierno continuaban haciéndose eco de los mensajes de condolencias que llegaban de todos los rincones del continente y del resto del mundo, miles de personas se reunían en vigilias espontáneas en las calles y plazas de las principales ciudades del país para orar por el mandatario, que llegó al poder en 1999 y encabezó el proyecto que él denominó como Socialismo del Siglo XXI.

Tras sobrevivir a un golpe de Estado, un paro petrolero y numerosos intentos desestabilizadores más llevados a cabo por la oposición durante sus 13 años en el Gobierno, Chávez ha perdido la batalla contra un cáncer que le fue detectado en 2011 y que le obligó a pasar por el quirófano en cuatro ocasiones, la última de las cuales, practicada el 11 de diciembre pasado, le impidió ser investido presidente para el mandato hasta el 2019 que había ganado en las elecciones de octubre de 2012.

Siete días de duelo oficial ha declarado ya el Gobierno de Venezuela, para rendir homenaje a su líder y “para que el mayor número de personas de nuestro pueblo puedan ver a su padre, su libertador, su protector” y darle su último adiós, informó este martes el ministro de Relaciones Exteriores, Elías Jaua.

En un mensaje hecho público horas después de conocerse la noticia del deceso (a las 4:25 de la tarde, según anunció el vicepresidente Nicolás Maduro), Jaua precisó que los restos mortales de Chávez serán trasladados este miércoles desde el Hospital Militar hasta el Hall de la Academia Militar de Venezuela.

“Ya indicaremos que ruta vamos a seguir. Será un traslado acompañado por el pueblo (...) Vamos a recibirlo en Los Próceres, donde se hacen los desfiles, luego comenzarán las exequias”, que se extenderán durante miércoles, jueves y viernes, día en el que se celebrará la ceremonia de despedida oficial ante los líderes del mundo que acudirán al funeral.

Jaua añadió que pese al “impacto de la noticia del fallecimiento del Comandante, el país está en absoluta normalidad” y pidió al pueblo a “movilizarse en paz” y no dejar “que nos lleven a una confrontación ni que propicien el escenario para una intervención internacional”.

“Es un deber de todos preservar la paz de Venezuela”, subrayó el canciller, que también instó a los medios de comunicación a “fomentar la paz” y llamó a la oposición a mantener el debido respeto.

Finalmente precisó que el Gobierno y los poderes del Estado, cumplirán la Constitución de la República. “Que no queden lugar a especulaciones”.

El ministro de anunció también que el vicepresidente Nicolás Maduro tomará posesión del cargo como presidente interino y que en 30 días se celebrarán elecciones para presidenciales, una decisión que contradice la de las fuentes que han indicado que el titular de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, sería el encargado de asumir el cargo, siguiendo lo establecido en la Constitución, y convocar los comicios en el mismo lapso de tiempo.

Precisamente Cabello declaró este martes en cadena de radio que a los seguidores de Chávez “nos toca luchar” y aseguró que “lo que tengamos que aprobar en la Asamblea para hacerle un reconocimiento al hombre más grande de este país en muchos años, lo vamos a hacer”. “Estamos obligados a no fallarle al comandante, aquí se nos tienen que ir la vida también, y descansar el día que esta sea una revolución de verdad”.

Por su parte, el líder opositor y rival de Chávez en las elecciones de octubre pasado, Henrique Capriles, manifestó que la historia de Venezuela continuará pacíficamente. “Esta no es la hora de la diferencias, es la hora de la unión, es la hora de la paz”.

Mientras tanto, en los alrededores del Hospital Militar de Caracas cientos de personas continuaban llorando la muerte del mandatario. “Tengo el corazón destrozado, como si se me hubiese muerto un padre o un hijo”, dijo a AFP Ariani Rodríguez.

“Se nos fue el comandante en cuerpo, pero nos quedó su pensamiento y su liderazgo”, añadió Rodríguez, una docente que se mostraba muy conmovida y llevaba una camisa con una impresión de los ojos del presidente venezolano y una pancarta en la que se leía: “Yo soy Chávez”.

Como ella, numerosos seguidores del mandatario -muchos vestidos con el color rojo del partido oficialista- acudieron a las puertas del centro de salud con fotos del mandatario y pancartas con mensajes de amor al fallecido líder.

Algunos portaban banderas de Venezuela, gorras del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y varias pancartas, entre ellas dos con el lema: “Chávez, nuestro libertador del siglo XXI” y “Pueblo, Chávez, Revolución, la lucha continúa”.