Los ataques a medios de comunicación en Panamá por la difusión noticiosa de temas como la corrupción se intensificaron en 2012 en el país hasta 275 por ciento, dijo un balance sobre el tema difundido hoy en la capital panameña.
El matutino La Prensa destacó que la información está condensada en un informe del Sindicato de Periodistas de Panamá, según el cual por lo menos 60 ataques contra la libertad de expresión, incluyendo declaraciones públicas, demandas y querellas contra periodistas y medios de comunicación, fueron reportados en 2012.
Filemón Medina, secretario del Sindicato de Periodistas de Panamá, precisó que la cifras indican que el año pasado hubo un aumento sustancial de los casos señalados (un 275 por ciento) en comparación con los reportes sumados en 2011, y de 400 por ciento si se tiene en cuenta los 12 casos registrados de 2010.
Medina pronosticó un panorama mucho peor para 2013, por tratarse de un año prelectoral ante los comicios generales previstos en mayo de 2014, y previó que haya más noticias sobre casos de corrupción y -posiblemente-más ataques (a medios y / o periodistas).
Un resumen sobre el tema, que menciona como base registros del ministerio Público y del Organo Judicial, da cuenta sobre por lo menos 24 procesos contra 33 periodistas y medios de comunicación en los últimos años en el país.
Se resaltó que tan sólo en 2012 se presentaron cuatro querellas por calumnia e injuria, y cinco demandas civiles por daños y perjuicios contra periodistas y medios de comunicación, en el que fue además el año con más casos de la última década.
El presidente del Colegio Nacional de Periodistas, Rafael Candanedo, opinó, según el diario, que el problema es que hay una tendencia a criminalizar el trabajo de los periodistas cuando los protagonistas son funcionarios.
Agregó que lo peor es que en la mayoría de los casos los periodistas son condenados por los administradores de justicia.
El representante de la gremial abogó para que en Panamá se cumplan las normativas sobre la libertad de expresión establecidas en convenios internacionales y en la propia Constitución, y por el respeto al trabajo de los periodistas. Fi