El presidente colombiano Juan Manuel Santos anunció hoy que su país se retira del pacto de Bogotá, firmado en 1948, que reconoce la jurisdicción de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), luego de que se conoció un fallo que "despojó" al país sudamericano de unos 75.000 kilómetros cuadrados de aguas en el mar Caribe y los entregó a Nicaragua.
"He decidido que los más altos intereses nacionales exigen que las delimitaciones territoriales y marítimas sean fijadas por medio de tratados, como ha sido la tradición jurídica en Colombia, y no por sentencias proferidas por la Comisión Internacional de Justicia", declaró el jefe de Estado.
Durante la instalación del Congreso Nacional Cafetero en Bogotá, Santos explicó que el fallo de la CIJ no fue emitido en derecho, pues afectó los tratados limítrofes de su país con Honduras y Panamá.
Además, dijo, la comunidad de la isla de San Andrés y Providencia fueron los más afectados con la pérdida del mar territorial donde pescaban esos habitantes.
"Con esta denuncia, Colombia no pretende separarse de la solución pacífica de las controversias. Por el contrario, Colombia reitera su compromiso de recurrir siempre a procedimientos pacíficos", comentó.
Según Santos, los límites fronterizos son fijados por los tratados entre los países y no por la sentencia del tribunal de La Haya. Desde la víspera, Colombia denunció al pacto de Bogotá ante la Organización de Estados Americanos (OEA).
"Ella (la CIJ) los fija con base en criterios indeterminados de equidad, que son aplicados de manera incierta en perjuicio de los derechos de los Estados y de los pueblos. Por eso, en el día de ayer Colombia denunció el Pacto de Bogotá.
"El aviso correspondiente fue entregado al secretario general de la OEA. Surtirá efectos respecto de los procesos que se inician después de transmitido el aviso", afirmó.
El jefe de Estado dijo que "nunca más" debe volver a pasar lo que ocurrió el 19 de noviembre, cuando se pronunció la sentencia de la CIJ que "despojó" a Colombia de mar territorial y se lo entregó a Nicaragua.
"Esta denuncia forma parte de las medidas que hemos venido estudiando. No impide que Colombia acuda a todos los mecanismos y recursos que concede el derecho internacional para defender nuestros intereses y proteger los derechos de los colombianos", aseveró.
"La decisión que he tomado obedece a un principio fundamental: los límites entre los Estados deben ser fijados por los propios Estados. Las fronteras terrestres y los límites marítimos entre los Estados, no deben quedar en manos de una corte, sino que deben ser fijados de mutuo acuerdo por los Estados mediante tratados", agregó.
Santos dijo que varios países que no aceptan la jurisprudencia de la CIJ comparten la posición de Colombia. El mandatario dijo que esas naciones son "respetuosas del derecho internacional", pese a no aceptar a la corte.
El Pacto de Bogotá o Tratado Americano de Soluciones Pacíficas fue suscrito en 1948 y reconoce a la CIJ, con sede en La Haya (Holanda), para dirimir este tipo de litigios entre países del área. Fi