Las políticas de prevención contra el tabaco adoptadas por el gobierno brasileño evitaron la muerte de al menos 420.000 personas en las últimas dos décadas, según un estudio del Ministerio de Salud.
La proyección fue realizada por el Instituto Nacional del Cáncer (Inca) del Ministerio de la Salud con base en un modelo matemático desarrollado por investigadores estadounidenses y que fue adaptado para las condiciones brasileñas.
El estudio, cuyos resultados fueron destacados en un artículo publicado el martes por la revista científica PLos Medicine y reproducidos en portales locales, evaluó el impacto de las diferentes políticas y campañas de prevención adoptadas por el país entre 1989 y 2010.
Entre tales políticas destacan el aumento de los impuestos sobre los cigarrillos, la prohibición de la publicidad del tabaco y la norma que obliga a los fabricantes de cigarros a publicar imágenes de impacto en sus embalajes.
De acuerdo con el estudio, si Brasil no hubiese adoptado ninguna de esas medidas, cerca del 31 por ciento de los brasileños serían fumadores, es decir tres de cada diez brasileños, en lugar del 16,8 por ciento actual.
Por el contrario, con las medidas ya adoptadas y aunque ninguna otra sea puesta en ejecución, la tendencia es que el porcentaje de fumadores siga reduciéndose y llegará al 10,3 por ciento en el 2050.
Según André Szklo, investigador de la división de epidemiología del Inca, hasta el 2050 será posible salvar la vida de siete millones de brasileños que abandonaran el tabaco hasta entonces o nunca adoptaron el vicio.
Además de las muertes, las medidas preventivas evitan el desarrollo de diferentes tipos de cáncer, problemas respiratorios y enfermedades cardiovasculares, entre otras.
Los cálculos fueron hechos a partir del SimSmoke, un modelo con diversas ecuaciones y algoritmos desarrollado por investigadores de la Universidad Georgetown y que ha sido usado por unos 30 países.
Según los últimos cálculos oficiales, cerca de 25 millones de brasileños fuman, hábito que se extiende al 21,4 por ciento de los hombres y el 13 por ciento de las mujeres.