Más de 425.000 metros cúbicos de arena son vertidos hoy en un área de cuatro kilómetros de la playa del afamado balneario cubano de Varadero, el principal polo turístico de Cuba.
"Estamos vertiendo arena mediante una técnica de alimentación artificial que restablece en breve tiempo las condiciones naturales de las playas" dijo el jefe del Departamento de Procesos Costeros del Instituto de Oceanología del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, el doctor José Luis Juanes.
"Varadero manifiesta un proceso de erosión irreversible. Tiene una tendencia a la pérdida de arena bien estudiada y demostrada. Desafortunadamente no hay otra opción que mantenerla de manera artificial para conservarla", señaló Juanes al diario cubano Juventud Rebelde.
El nuevo proyecto, que forma parte del Programa nacional para la recuperación y mantenimiento de las playas de Cuba, comenzó hace apenas dos semanas e incluye el vertido en un área de cuatro kilómetros, a un costo cercano a los siete millones de dólares.
Según el especialista, la técnica de alimentación artificial de arena se realiza mediante una draga autopropulsada, en este caso de una empresa holandesa, que extrae el valioso "polvo" de una cuenca situada a una distancia prudencial de la costa para evitar impactos ambientales desfavorables.
"La draga baja unos tubos de succión, los pega al fondo de la cuenca de arena, la succiona, llena su capacidad de almacenamiento, y luego marcha a la zona de vertimiento. Por medio de una tubería bombea la arena hasta la costa", explicó el doctor Juanes.
"Esta maquinaria trabaja continuamente, de día y de noche, sin parar", agregó.
Juanes señaló que esa técnica se aplica desde la década de los años 20 del pasado siglo en Estados Unidos, y se ha hecho muy popular.
"Hoy por hoy es la más utilizada en los grandes polos turísticos para el mantenimiento de las playas", aseveró.
En Cuba se aplicó por primera vez en la década de los 80 en Varadero, aunque el primer proyecto con dragas de gran envergadura se ejecutó en 1987, como parte de una campaña que se extendió desde ese año hasta 1992, período en que se depositaron 700.000 metros cúbicos en las zonas más erosionadas.
En 1998 se ejecutó otro proyecto, de un millón 087.000 metros cúbicos de arena, que fue el más ambicioso hasta esa fecha en Cuba y el Caribe, al que le siguieron otros en el 2002 y el 2008, con la inclusión del litoral de la oriental provincia de Holguín.
"Es la opción por la que más se apuesta en todo el mundo. Pero, si bien nuestro objetivo fundamental es recuperar las playas como recurso turístico, los proyectos están contemplando también diseños que permitan dar respuesta a la elevación del nivel del mar por el cambio climático", apuntó Juanes.
Luego de concluir los estudios de impacto ambiental y de poner en orden las licencias pertinentes, se realizarán proyectos similares en Guardalavaca, provincia de Holguín, así como en Cayo Guillermo y Cayo Coco, en el norte de la central provincia de Ciego de Ávila, otro importante polo turístico de la isla.
Varadero prepara la venidera XXXIII Feria Internacional del Turismo 2013 (FIT 2012), que se realizará del 7 al 10 de mayo próximo, con el propósito de llegar al quinto año consecutivo con más de un millón 300.000 visitantes.
La zona ha tenido en los últimos años un desarrollo vertiginoso, pues antes de l990 la hotelería era incipiente, con solo tres hoteles reconocidos, Internacional, Caguama y Oasis, mientras que el resto eran villas turísticas formadas por casas que fueron de millonarios que abandonaron el país tras la revolución de 1959.
En 1990 se inauguraron los hoteles Paradiso -hoy Playa Caleta- y Sol Palmeras, y al año siguiente se estrenan Punta Arenas y Meliá Varadero, a partir de lo cual comienza todo el desarrollo del turismo en la llamada Playa Azul.
Varadero tenía 4.700 habitaciones y hoy cuenta con 18.742, la mayoría construidas en los momentos más difíciles del Período Especial, como se denomina en la isla a la crisis que sobrevino tras la desaparición de la Unión Soviética y del campo socialista europeo, principales aliados entonces del gobierno cubano.
En la actualidad, el Mintur trabaja en el perfeccionamiento de la infraestructura y ejecuta un ambicioso plan que incluye mejoras en alcantarillado, electricidad, agua y viales.
También se trabaja en la ampliación de la red hotelera y en la creación de la Marina de Varadero, y todo eso cuidando el medio ambiente y la duna, para no perder la belleza natural de la playa.
Varadero es una pieza clave en el desarrollo de la industria turística cubana, segunda fuente de divisas del país, detrás de la exportación de servicios técnicos y profesionales.
De acuerdo con cifras de la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI) la llegada a la isla de dos millones 021.649 vacacionistas extranjeros en los primeros ocho meses del año, constituye un crecimiento de 5,2 por ciento en comparación con igual período del año anterior.
Cuba espera recibir de 2,9 millones de turistas en 2012, lo que marcaría un récord para la isla.
En la actualidad, la isla tiene 335 hoteles y con una capacidad total de alojamiento de 58.434 habitaciones, de las que el 65 por ciento clasifican en instalaciones de cuatro y cinco estrellas.
El 71 por ciento de esas habitaciones están dedicadas al turismo de sol y playa, mientras 23 al de ciudad y 2 al de naturaleza.
En Cuba hay 30 empresas mixtas que tienen en operación más de 6.000 habitaciones, además de 62 contratos de administración y comercialización con 13 cadenas hoteleras internacionales. Fi