El presidente de Bolivia, Evo Morales, exigió hoy a Estados Unidos que ponga fin al mercado interno de cocaína para acabar con el narcotráfico, en el marco de la corresponsabilidad internacional de la lucha contra este ilícito.
"Estados Unidos no tiene ninguna autoridad moral para estar descalificando a otros países. Primero, si quiere tener autoridad en la lucha contra el narcotráfico ¿por qué no erradican el mercado (de la droga) de Estados Unidos?", señaló Morales.
El mandatario boliviano justificó esta posición al señalar que cuando Estados Unidos erradique el mercado de la cocaína en ese país, ya no recibirán más productos ilegales de coca.
El mandatario boliviano descalificó de esta manera el informe que presentó el presidente de Estados Unidos Barack Obama al Congreso de su país el viernes, en el que señala que Bolivia, Mianmar y Venezuela "fracasaron ostensiblemente" durante los últimos 12 meses en sus esfuerzos para cumplir las obligaciones a las que se han comprometido según acuerdos internacionales antinarcóticos.
Esta visión le valió a Bolivia sufrir una vez más la "descertificación" estadounidense en la lucha contra el narcotráfico.
El gobierno de Bolivia rechazó el viernes "enérgicamente" el informe presentado por el presidente Obama en lo referente a que el Estado boliviano había fracasado en cumplir acuerdos antinarcóticos internacionales en el último año.
La Cancillería boliviana a través de un comunicado oficial expresó su molestia por dicho informe y dijo que los indicados y reconocidos para evaluar el actuar de Bolivia en la lucha antidroga son instancias multilaterales.
En un acto público en el que entregó un comedor a la Escuela de Formación de Maestros en la ciudad de Oruro, el mandatario boliviano reiteró el rechazo a la descertificación del presidente Obama.
"Como siempre el Departamento de Estado de Estados Unidos da un informe sobre la lucha contra el narcotráfico en toda Latinoamérica y como siempre nos aplazan", agregó al señalar que esta situación no le da "miedo".
Morales dijo que el mensaje político estadounidense está "claro" porque descalifican la lucha antidroga sólo a países y gobierno anticapitalistas, como es el caso de Bolivia a la que la señalan que no aporta su esfuerzo en la lucha antidrogas.
En cambio dijo que a los países que comparten la política capitalista y que tienen bases militares de Estados Unidos en sus territorios mo los "aplazan" en esta temática.
Morales explicó su rechazo a ese informe por tres razones.
En primer lugar, manifestó que Estados Unidos no tiene "moral, autoridad ni ética para hablar de lucha contra el narcotráfico".
El mandatario argumentó esta posición, pues dijo que el origen del narcotráfico es el país del norte con su amplio mercado interno para las drogas.
El mandatario emitió una pregunta para el gobierno de Estados Unidos, para que le informen cuál es el porcentaje que han reducido su mercado interno de las drogas.
Morales respondió a esa interrogante y dijo que es todo lo contrario porque ese mercado sigue creciendo y más bien en algunos estados de ese país se está legalizando la venta de drogas bajo el control médico, cuando en Bolivia ni siquiera quiere reconocer el acullico tradicional (masticado) de la hoja de coca.
INTERVENCIONISMO
El segundo argumento para el rechazo a dicho informe es que Estados Unidos elabora este tipo de informes para justificar mayor inversión y por tanto mayor intervención de países que tienen gobiernos antiimperialistas.
"Este informe es para conseguir y justificar mayor gasto militar, y con el pretexto de mayor gasto militar (...) más bien lo que hace Estados Unidos es aprovechar el narcotráfico con fines netamente geopolíticos, por eso se justifican las bases militares en algunos países de Latinoamérica", afirmó.
"Estoy convenció que el narcotráfico más bien es el mejor negocio para Estados Unidos cuando le conviene, usa el narcotráfico sólo para intervenir países", afirmóMorales.
Además dijo que sería importante revisar el informe antidroga presentado por Estados Unidos de otros países que tienen bases militares y pro-capitalistas, porque está seguro de que el gobierno de Obama "nunca los aplazará".
Asimismo, destacó que la comunidad internacional a la cabeza de la ONU, reconoce los esfuerzos positivos que ejecuta Bolivia en esta lucha contra el narcotráfico, pero lamentó que Estados Unidos decida políticamente este tema.
El jefe de Estado explicó que una tercera razón es que "no acepto ningún informe y no tienen por qué decidir (lo que deben) informar sobre nosotros".
Recordó que si Estados Unidos quiere hacer un informe antidroga de Latinoamérica entonces sugirió a los presidentes de esta región conformar una comisión para evaluar si esa nación está luchando contra el narcotráfico, está reduciendo el mercado interno y hace un control de los bancos levantando el secreto bancario porque "se mueven millones y millones".
Manifestó que antes de su gobierno (2006) Estados Unidos apoyaba el combate contra el narcotráfico en Bolivia con la entrega anual en promedio de 50 millones de dólares, pero que desde que asumió su gobierno se les ha quitado ese respaldo.
"No me quejo, no estamos arrepentidos porque hemos nacionalizado la lucha contra el narcotráfico con el apoyo del pueblo boliviano y lo seguiremos haciendo", al señalar que cuando nacionalizaron la lucha antidroga en el país se obtuvieron resultados sin precedente en erradicación de campos de coca y en la incautación de cocaína. Fi