El Banco Central de Brasil anunció la noche del viernes una reducción de los porcentajes de reserva obligatorios sobre los depósitos de los clientes que debe respetar la banca comercial con el objetivo de inyectar 30.000 millones de reales (unos 15.000 millones de dólares) en la economía.
En una nota, el emisor brasileño aseguró que a partir de hoy, queda anulada la cuota adicional de reserva del 6 por ciento que incide sobre los depósitos a vista y que fue introducida en 2002, además de reducir en un punto porcentual la obligación de preservar un 12 por ciento de los depósitos a plazo fijo a partir del próximo día 29, que pasará a ser del 11 por ciento.
Para ello, el Banco Central brasileño permitirá a la banca comercial que la mitad del encaje sobre los depósitos a plazo fijo se cumpla mediante la adquisición de letras y carteras de crédito.
El conjunto de medidas pretende inyectar 30.000 millones de reales (unos 15.000 millones de dólares) en la economía nacional y contribuir a ampliar el perfil de "captación del sistema y mejorar la distribución de liquidez en el mercado interbancario", según el comunicado.
Las modificaciones también servirán para reducir los costes de intermediación financiera y ofrecer mejores condiciones para que el sector opere de forma más eficiente "en línea con las reformas estructurales por las que pasa la economía brasileña".