"Las necesidades más urgentes son agua, saneamiento, alimentos, albergues, mantas y atención médica", dijo. "Menos de la mitad de las instalaciones de salud y hospitales están funcionando actualmente en Siria".

"La destrucción de plantas farmacéuticas y de instalaciones de almacenamiento está conduciendo a la escasez de medicamentos y equipo", dijo. "Al mismo tiempo, el número de personas que necesita atención médica va en aumento".

"El acceso a las instalaciones de salud se ha vuelto difícil o imposible en algunas áreas por causa de la violencia, los puestos de control y la escasez de combustible", dijo. "En algunas zonas los precios se han triplicado".

"Un gran número de sirios han sido desplazados a nivel interno y son apoyados por familiares o amigos", señaló. "Más de 1,2 millones más han buscado refugio en edificios públicos como escuelas y mezquitas, las cuales carecen de agua y saneamiento adecuados".