El ministro chileno de Hacienda, Felipe Larraín, desestimó hoy consecuencias en el flujo de inversiones ante las críticas del empresario brasileño Eike Batista, por el rechazo a su iniciativa de construcción de una termoeléctrica.
"Ayer tuvimos cifras récord de inversión extranjera", dijo Larraín a una televisora local.
"Estamos muy contentos, porque en el primer semestre de este año Chile ha tenido un récord de inversión extranjera que ha superado los 12.000 millones de dólares en el período enero-junio de 2012, creciendo un 80 por ciento respecto del año pasado", agregó.
La Corte Suprema de Chile ratificó el rechazo a la construcción de la central termoeléctrica Castilla, que con una inversión de 4.400 millones de dólares, pretendía generar 2.100 MW a base de carbón.
La decisión judicial basada principalmente en la convicción de los jueces respecto a los daños ambientales que suponía, en la región nortina de Atacama, despertó una ácida crítica de su propietario, el multimillonario brasileño Eike Batista, quien señaló a través de la red social Twitter que la inversión en Chile "se está volviendo imposible".
Pese a desestimar los cuestionamientos el ministro Larraín deslizó críticas a la decisión judicial.
"Nos preocupa lo que está pasando en el sector energético", porque "Chile tiene uno de los costos energéticos más altos en América Latina", indicó.
La decisión judicial se agregó a las dudas expresadas por uno de los controladores del mega proyecto de central hidroeléctrica Hidroaysén, la sociedad Colbún, dueña del 49 por ciento de la iniciativa (Endesa, filial de Endesa España, 51 por ciento), al señalar que estudia recomendar la paralización del proyecto ante los cuestionamientos que suscita. Fi