El gobierno de Brasil pretende cerrar 2012 con 58 por ciento de los hogares brasileños conectados a internet, afirmó hoy el ministro de Comunicaciones, Paulo Bernardo, en encuentro con líderes empresariales en Sao Paulo.
La meta se inscribe dentro de los objetivos del Plan Nacional de Banda Ancha, implementado por el gobierno de Dilma Rousseff como una de sus prioridades desde su llegada al poder en enero de 2011.
"Terminamos 2010 con 27 por ciento de los domicilios con acceso a internet. El año pasado (2011) fuimos para 38 por ciento, y nuestra proyección es que cerremos (2012) con 58 por ciento de los domicilios (conectados). Manteniendo ese ritmo, llegaremos a 70 por ciento en 2015", afirmó.
El ministro destacó también el crecimiento del uso de internet vía celular y la necesidad de un nuevo plan de banda ancha.
"El aumento en la internet móvil fue de 103 por ciento el año pasado, o sea, más que el doble. Por esa razón, en 2013 vamos a lanzar un nuevo plan nacional de banda ancha", afirmó.
Según Bernardo, el gobierno está trabajando para la universalización de internet en el país, a la que considera una prioridad para el desarrollo social y económico.
El ministro consideró también que hay distorsiones en el sector que precisan ser reparadas para un mejor acceso a los servicios de telefonía, como cambios en la tributación y la infraestructura.
"Pretendemos modificar la tributación del sector. Tenemos una tributación altísima en las telecomunicaciones, pero creemos que podemos modificar eso y mantener la recaudación, porque los servicios van a expandirse mucho. Hoy, en una factura de teléfono e internet fija de 100 reales, 36 son impuestos. En la tecnología móvil también son en ese nivel", explicó.
El sector de telecomunicaciones obtuvo una facturación bruta de 162.000 millones de reales (unos 80.000 millones de dólares) en 2011, un crecimiento de 10 por ciento con relación al año anterior, y la previsión para este año es de una facturación récord. Fi