El ministro de Petróleo y Minería de Venezuela, Rafael Ramírez, ratificó hoy que el incendio que inició el sábado en las instalaciones de la refinería Amuay, en el estado Falcón (noroeste), está confinado actualmente a sólo dos tanques de gasolina.
Por medio de una breve transmisión televisiva, el ministro Ramírez, en compañía del vicepresidente ejecutivo del país, Elías Jaua, y el gerente de Amuay, Jesús Luongo, ofrecieron detalles sobre las labores de extinción del fuego en la refinería.
La cifra de fallecidos no ha sido actualizada desde la noche del sábado. Los muertos son 39. la mayoría miembros de la Guardia Nacional y familiares que se encontraban en las instalaciones.
El número de heridos se mantiene en 86 personas, algunas de las cuales sufrieron quemaduras hasta en 75 por ciento de su cuerpo y entre las cuales se cuentan tres niños.
Los funcionarios explicaron que la explosión registrada en un tanque de Gas Licuado de Petróleo (GLP) afectó en principio nueve depósitos de almacenamiento de naftas y gasolinas, pero gracias a la acción de los bomberos las llamas pudieron ser controladas rápidamente en siete de éstos.
“Estamos en labores de enfriamiento y extinción. Nuestras áreas de proceso están en normalidad. Hemos hecho una parada programada. Nuestro esfuerzo está en tratar de extinguir el fuego en los dos tanques”, precisó Ramírez.
Por su parte, el gerente de la refinería se mostró optimista en que las condiciones atmosféricas podrían ayudar en los trabajos que se ejecutan para sofocar definitivamente las llamas.
“Los cálculos nos dicen que se necesitan 4.000 galones por minuto por 65 minutos, con espuma, para poder extinguir completamente el incendio. Eso va a depender de la velocidad del viento. Ahorita está como sopla naturalmente en Paraguaná (Falcón), hay mucha brisa”, detalló Luongo.
Para sofocar la combustión de una sustancia altamente inflamable como la gasolina, se utiliza una espuma química especial que aísla el combustible del oxígeno impidiendo la propagación del fuego.
Por ahora, imágenes de la prensa audiovisual mostraban dos grandes hogueras con enormes columnas de humo, producto de la quema de miles de litros de gasolina cada minuto, lo que genera altas temperaturas y un fuerte rugido en la zona de la refinería.
“En caso de que no pudiéramos apagar el tanque, el incendio está controlado y confinado. La técnica es garantizar el enfriamiento de las paredes del tanque y dejar que se consuma”, agregó el gerente de Amuay.
Luongo también señaló que es “muy poco probable” que a estas alturas el fuego escale y se salga de control nuevamente, y reiteró que en caso de no poder sofocarlo hay que dejarlo consumirse, lo cual podría tardar un par de días.
En cuanto al suministro de combustible en el mercado interno de Venezuela, el ministro Rafael Ramírez dijo que está garantizado.“Tenemos diez días de inventario de productos como gasolina y diesel.
Hay cuatro millones de barriles de combustible almacenado y tenemos producción plena (en las demás refinerías del país)”, apuntó.
Amuay es una de las tres refinerías de crudo que integran el Complejo Refinador Paraguaná, el segundo mayor de su tipo en el mundo, con capacidad para procesar 940.000 barriles de crudo diariamente.
El sábado, alrededor de la 01:15 horas locales (05:45 GMT), una fuga en un tanque de almacenamiento de gas produjo una enorme explosión con una onda expansiva de unos 3,5 kilómetros, según la prensa local.
El estallido y los posteriores incendios arrasaron 209 casas y 11 comercios aledaños, además de un destacamento de la Guardia Nacional Bolivariana, en el cual se encontraban 18 de las 39 víctimas fatales del incidente.
De acuerdo con reportes aparecidos en la edición dominical de los diarios venezolanos, vecinos de la refinería e integrantes del Sindicato de Trabajadores del Petróleo de Falcón denuncian negligencia del personal de Petróleos de Venezuela (PDVSA), que no atendió a tiempo las alarmas por un fuerte olor a gas en la zona.
Entre tanto, el gobierno nacional ha desplegado un operativo de contingencia que inició pocas horas después de la explosión y que incluye el desalojo de familias habitantes de las zonas residenciales vecinas a Amuay, por medidas de seguridad.
También se habilitó una decena de centros de acopio de alimentos y medicinas en el estado Falcón y otras ciudades, como Caracas y Maracaibo (Zulia, noroeste), al tiempo que los heridos de mayor gravedad fueron trasladados a hospitales en Maracaibo, que cuentan con mejores condiciones para su atención.
El presidente venezolano Hugo Chávez emitió también un comunicado en el que expresó el pesar del gobierno nacional por la tragedia de Amuay, y llamó a la calma y a la solidaridad con los afectados del estado Falcón. Fi