Luego del breve paso por tierras del oriente de la isla de la tormenta tropical "Isaac", los cubanos se preparan este domingo a recibir las intensas lluvias asociadas a ese fenómeno meteorológico que transita por los mares del norte-centro del país.
A pesar de que la tormenta dejó el territorio cubano, las autoridades y el jefe del Centro de Pronósticos del Instituto de Meteorología (Insmet), José Rubiera, alertaron sobre la amenaza que significan las lluvias que continuarán durante el domingo en todo el país.
Rubiera explicó en la televisión que, a medida que la tormenta se aleje de Cuba y se acerque a los cayos de La Florida se intensificará, y puede llegar a convertirse en un huracán.
Al ganar fuerza, "Isaac" comenzará a arrastrar sus bandas de alimentación, y éstas transitarán por encima de la región oriental, luego central y occidental del país, advirtió.
En ese sentido, el general de división Ramón Pardo Guerra, jefe del Estado Mayor de la Defensa Civil (DC) cubana, instó a utilizar la infraestructura creada en la isla para prevenir y reducir el impacto de fenómenos naturales.
"Debemos prestarle toda la atención a 'Isaac', aunque es una tormenta y carece de la potencia de los huracanes que conocemos", dijo Pardo.
Hasta el momento, las autoridades no han reportado víctimas, ni la cuantía de los daños en viviendas y cultivos por las lluvias y vientos, así como el número total de evacuados de zonas vulnerables, sobre todo costeras debido a inundaciones.
El sistema de DC cubano, que realiza sistemáticos ejercicios de preparación a nivel nacional, tiene una alta eficiencia en la protección de las personas, que ha sido elogiada por organismos internacionales.
La isla registró lluvias y chubascos en todo su territorio por la llegada de "Isaac", que tocó tierra al mediodía del sábado con vientos máximos sostenidos de 95 kilómetros por hora tras pasar por Haití, donde dejó seis muertos y cuantiosos daños.
"Isaac" entró en territorio cubano poco después de las 11 de la mañana (15:00 GMT) por la provincia de Guantánamo, en el extremo oriental de la isla, y volvió al mar casi cinco horas después por el litoral norte de la provincia de Holguín, a casi 800 kilómetros de La Habana.
El mar penetró a tierra en varios puntos del este cubano, lo que obligó a la evacuación de varios miles de personas, entre ellas turistas extranjeros, mientras que otros fueron retirados de áreas cercanas a ríos ante la posibilidad de inundaciones.
Hasta 20 centímetros de lluvia habían caído en algunos puntos, y se esperaba más mientras la tormenta avanzaba hacia el noroeste, en dirección a los Cayos de La Florida, donde se han emitido alertas de huracán, y al Golfo de México.
En las seis provincias orientales más afectadas por el paso de la tormenta, Santiago de Cuba, Guantánamo, Holguín, Granma, Las Tunas y Camagüey, rige desde el viernes una alerta por tormenta tropical.
Anoche, el presidente cubano, Raúl Castro, y el primer vicepresidente, José Ramón Machado Ventura, intercambiaron vía telefónica con el Consejo de Defensa Provincial de Guantánamo, la provincia con el mayor impacto de "Isaac", informó la televisora local Solvisión.
Esta es la novena tormenta tropical en el Atlántico, y la primera que azota a Cuba en la actual temporada ciclónica, que comenzó el 1 de junio y finalizará el 30 de noviembre. Fi