El tren de alta velocidad que unirá las ciudades brasileñas de Río de Janeiro, Sao Paulo y Campinas, el primero de toda América Latina en su tipo, será inaugurado en 2018, anunció hoy el presidente de la Empresa de Planificación y Logística (EPL), Bernardo Figueiredo.
En rueda de prensa con corresponsables extranjeros, el funcionario expresó su confianza en que los términos de la nueva licitación abierta para la participación de empresas del sector privado en el proyecto, incluso extranjeras, permitirá una mayor competencia.
La construcción será dividida en cerca de 10 trechos para acelerar el proceso hasta la operación del tren, que el gobierno estima ocurrirá como máximo en 2020.
La Agencia Nacional de Transportes Terrestres (ANTT) de Brasil anunció el jueves que el resultado de la licitación será divulgado el 29 de mayo de 2013.
Según la licitación divulgada por la ANTT, las empresas interesadas deberán entregar sus propuestas hasta el 30 de abril del año próximo.
La licitación será realizada en dos partes: una para elegir a la empresa que ofrecerá la tecnología del vehículo y operará la línea, y otra para definir a las empresas que construirán la infraestructura para el tren, incluidas las vías y las estaciones.
El cálculo estimado de inversiones para la obra completa es de 33.000 millones de reales (unos 16.500 millones de dólares).
En total serán 510,8 kilómetros de trayecto y la tarifa techo a ser ofertada no podrá superar 0,49 reales (0,25 dólares) por kilómetro en clase económica.
En tres ocasiones, la última a mediados del año pasado, la licitación para la construcción del tren de alta velocidad terminó sin resultados, ante lo cual el gobierno modificó el edicto para eliminar el riesgo de demanda que alejaba a las empresas.
Según Figueiredo, el estatal Banco de Desarrollo Económico y Social (BNDES) financiará hasta 60 por ciento del proyecto en moneda local para evitar el riesgo cambiario, con tasas de interés preferenciales y hasta 25 años de plazo para su reembolso.
La EPL gestionará la realización de la licitación, el monitoreo del proceso de construcción y luego la gestión del operador que resulte vencedor.
De acuerdo con las autoridades, el proyecto del llamado "tren bala" es esencial para resolver los problemas de transporte entre Río de Janeiro y Sao Paulo, el puente aéreo con más movimiento de pasajeros del país.
El tren deberá transportar a 33 millones de pasajeros en su primer año de operaciones, hasta llegar a unos 100 millones en 2030. Fi