Un millonario estadounidense que falleció en junio pasado dejó parte de su herencia valorada en 40 millones de dólares a 18 brasileños que hace 20 años fueron becarios en su empresa, informaron hoy medios locales de comunicación.
El empresario Odd Odsen Junior, soltero y sin descendencia, mantuvo a lo largo de estas dos décadas una amistad con sus becarios brasileños, 10 de los cuales se quedaron a vivir en Estados Unidos y dos de ellos todavía trabajan en su empresa, que produce brazos articulados para aparatos electrónicos.
Odsen Junior murió el pasado 9 de junio a los 52 años de edad, víctima de un paro cardíaco en la ciudad de Glen Cove, Nueva York.
Cada uno de los beneficiados en su testamento puede recibir cerca de 300.000 dólares, según datos proporcionados porla prensa local.
Entre el patrimonio dejado por Odsen en su testamento destacan un caserón en Northampton, Estados Unidos, construido en el siglo XIII y un apartamento frente al Central Park de Nueva York.
Su hermana, Kristine Lamb, quien es profesora de música, fue la persona que recibió la mayor parte de la herencia.
Odsen estableció su vínculo con Brasil en 1976 cuando conoció, a los 16 años de edad, a un brasileño que realizaba un intercambio estudiantil en su colegio y quien se convirtió en su mejor amigo.
Todos los herederos, quienes han pedido mantener su identidad en secreto, son del sureño estado de Santa Catarina y uno de los que retornó a Brasil trabaja como representante de "Innovatite Office Products", la empresa de Odsen, a quien todos los años visitaba en la ciudad de Florianópolis, la capital del estado. Fi