El ministro de Obras Públicas de Chile, Laurence Golborne, consiguió su objetivo al visitar China: lograr que empresas constructoras de ese país se interesaran en participar en la licitación para la construcción del puente sobre el Canal del Chacao de la isla de Chiloé, en el sur del país.
Al finalizar su estadía en el país asiático, Golborme confirmó que próximamente técnicos chinos viajarán a Chiloé para examinar condiciones técnicas de futuro puente de Chacao, que tendría unos dos kilómetros y medio y su costo sobrepasaría los 700 millones de dólares.
"Ellos tienen bastante experiencia. De los diez mayores puentes colgantes, cinco se encuentran en China y están interesados en enviar sus equipos técnicos a Chile", dijo.
Junto a una delegación integrada por técnicos de su ministerio, Golborne recorrió tres puentes en China, y detalló que el Taizhou, que se encuentra sobre el río Yangtze, es el que tiene mayores similitudes con la obra proyectada en Chile.
"Uno ve el puente Taizhou y se imagina que funcionaría perfecto sobre el Canal de Chacao". Así lo anunció el ministro al terminar su visita a los tres viaductos que recorrió en su viaje a China, país al que llegó para revisar "in situ" las mejores alternativas para construir el puente que conectará la isla de Chiloé con el continente.
Informó que, junto al Comité de Inversiones Extranjeras (CIE), se encuentran haciendo las gestiones necesarias con la embajada chilena en China para que los expertos puedan viajar a Chile sin dificultades.
"En las reuniones hemos estado informando que está abierto el registro de contratistas (para construir en Chile) y aquí se han mostrado muy interesados. Las empresas que pueden participar, como plantea el anuncio, tienen que tener al menos un capital de 200 millones de dólares, experiencia en el levantamiento de puentes con más de 600 metros de superficie en suspensión y que lo hayan hecho con posterioridad a 1985", detalló.
Golborne y su comitiva viajaron desde Beijing, la capital china, hasta Shanghai, en el sur del país, y luego recorrieron los tres primeros puentes planificados en su visita (Runyang, Taizhou y Sutong), todos ellos ubicados en un radio a 300 kilómetros de esa ciudad. A ellos se agregó un cuarto puente en China, el túnel Shanghai sobre el río Yangtze.
De las tres megaestructuras, comentó que la que más llamó su atención fue el Taizhou. Se trata del viaducto colgante más parecido a la edificación proyectada sobre el Canal de Chacao, con un pilar central y dos vanos sobre mil metros, muy similar a lo que se requeriría en Chiloé.
"Este puente (que ya está terminado) lo inaugurarán en octubre. Lo pudimos ver desde todos los ángulos. Pasamos en barco por debajo, navegando por el río Yangtze, y estuvimos sobre sus seis pistas.
"Costó 650 millones de dólares y tiene un ancho de 35 metros", dijo el ministro, indicando que el pilar central está apoyado sobre el lecho del río, mientras "en Chiloé existe la roca remolino".
El ministro dijo que los equipos técnicos le aseguraron que el puente (cuya construcción demoró 4 años y medio, más 1 año y medio de proyección) "resiste temblores de magnitud 8, y les dijimos que requeriríamos que fuera más que eso (...) Acá en China existe amplia experiencia en ese tema, así que no hay problema", precisó.
Golborne dijo que la importancia de que las empresas de Oriente participen en el tema, radica en que en 2004 -en la anterior licitación del puente chileno- sólo hubo tres empresas interesadas y ninguna provenía de Asia.
Actualmente, el ministro y su delegación se encuentran en Corea del Sur, con el mismo propósito de lograr interesar a empresas de ese país a participar en la licitación del Puente del Canal del Chacao. Fi