La población indígena brasileña creció a un ritmo inferior al del resto del país durante la primera década de este siglo, según un informe divulgado hoy por el Gobierno.
Según la fuente, el crecimiento de los indios nativos fue del 11,4 por ciento, lo que significa que pasó de los 733.000 miembros en 2000 a los 817.000 en 2010, con un crecimiento medio anual del 1,09 por ciento.
La cifra de personas que se consideran indígenas representa el 0,4 por ciento de la población total brasileña, que creció de los 169.799.170 habitantes en 2000 a los 190.755.799 habitantes en 2010, un crecimiento acumulado del 12,3 por ciento, una media anual del 1,17 por ciento, según el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
Según la Fundación Nacional del Indio (Funai), actualmente existen 688 tierras indígenas (áreas demarcadas por el Gobierno Federal con aldeas indias) en el país, que albergan 220 etnias distintas.
Según el censo del IBGE, la presencia de indios en los municipios ha aumentado en los últimos años, pasando del 34,5 por ciento de las ciudades en 1991 al 63,5 por ciento de los municipios en 2000, y al 80,5 por ciento en 2010.
Del total de indígenas brasileños, un 61,44 por ciento vive en sus reservas o en zonas rurales, y el resto en ciudades. El 48,6 por ciento de los indígenas brasileños residen en áreas rurales de la región amazónica del país.
Las ciudades que concentran las mayores poblaciones indígenas son Sao Paulo (11.900) y Sao Gabriel de Cachoeira (Amazonas), con 11.000 indios. Fin