Un grupo de investigadores brasileños probó la viabilidad tecnológica del uso del glicerol, uno de los principales residuos de las reacciones que forman biodiesel, como materia prima para el cultivo de bacterias capaces de generar energía eléctrica.
Los científicos utilizaron medios enriquecidos con glicerol para desarrollar y multiplicar culturas de la Pseuromonas aeruginosa, una bacteria que, colocada en una célula a combustible, tiene la capacidad de transferir electrones para electrodos, es decir de generar electricidad.
La efectividad del glicerol como medio de cultura para células de combustible biológico, es decir de las que utilizan enzimas o microorganismos para la conversión de sustratos en energía, fue verificada por científicos del Instituto de Química de Sao Carlos de la Universidad de Sao Paulo (USP), informó hoy este centro académico.
Este tipo de bacterias pueden utilizar diferentes tipos de combustible para generar electricidad, entre los cuales el glicerol, explicó Adriano Soares de Oliveira Gomes, investigador de la USP que coordinó el proyecto.
"El glicerol, ante el crecimiento de la producción de biodiesel en Brasil, viene acumulándose como un producto indeseable, lo que estimula los estudios sobre tecnologías que puedan darle valor agregado a este subproducto", según Gomes.
Las células testadas poseen catalizadores soportados en las superficie de electrodos que realizan reacciones de oxidación y reducción de los combustibles, lo que genera energía. El combustible es alimentado de forma continua en la célula, lo que permite la producción ininterrumpida de energía.
"En las células convencionales la energía eléctrica es obtenida por medio de la combustión electroquímica de los combustibles", explicó Gomes.
"En los modelos microbianos, en cambio, la electricidad es conseguida cuando las bacterias son capaces de transferir los electrones producidos durante el metabolismo a electrodos", agregó.
La mayor parte de los proyectos con células microbianas utiliza materia orgánica de aguas residuales como medio de cultivo.
Los responsables por el proyecto de la USP optaron por el glicerol como medio de cultivo por tratarse de un residuo del biodiesel abundante y sin uso específico.
También fue escogido debido a que la Pseudomonas aeruginosa produce piocianina, que es un compuesto capaz de transportar electrones de las células bacterianas a un electrodo en la presencia del glicerol", según Gomes.
El desempeño de las células microbianas como generadoras de energía por lo general es considerado bajo en la comparación con el de las células convencionales para este fin.
"Pero el resultado que obtuvimos es comparable al obtenido con las células que vienen siendo desarrolladas por investigadores de otros países, lo que es un factor importante para incentivar la continuidad de los estudios", según el investigador.
El científico admitió que la baja densidad de potencia y el tiempo indeterminado de vida de estas bacterias limitan el desarrollo de aplicaciones prácticas para las células combustibles.
"Pero existen varias alternativas de uso, como en generadores auxiliares de electricidad en las propias industrias de biodiesel, lo que generaría una pequeña economía en los gastos con energía eléctrica", afirmó.
El investigador dijo igualmente que el proyecto seguirá con la construcción de un biorreactor de laboratorio que permite testar la producción de energía con una célula de gran volumen y electrodos mayores. Fin