Los ministros de Salud del denominado grupo BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) discutirán una posición común que será presentada en septiembre ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), adelantó hoy el ministro brasileño del sector, Alexandre Padilha.

En diálogo con medios chinos antes de viajar para participar de la reunión que mantendrán del próximo 11 de julio en Beijing, China, Padilha resaltó la importancia de una posición conjunta sobre el tema principal de la Asamblea de la ONU.

En dicha reunión, explicó, los jefes de Estado miembros de la organización analizarán medidas para enfrentar las Enfermedades Crónicas No Transmisibles.

El grupo BRICS congrega a las grandes economías en desarrollo, consideradas la fuerza dominante en la economía mundial hacia 2050 y con un peso creciente en la definición de lineamientos políticos para los temas más importantes a nivel global.

En Beijing, los responsables del área de Salud realizarán la primera reunión de un grupo de trabajo específico en la breve historia del grupo BRICS, en cumplimiento de la agenda de cooperación establecida por los presidentes de los cinco países en la Cumbre de Sanya, China, de abril pasado.

Los ministros buscarán intercambiar experiencias, trazar proyectos de trabajo y profundizar la cooperación entre los países miembros en la producción de medicamentos y la incorporación tecnológica en salud.

"Creemos que la unión de esos países puede ser fundamental para que podamos producir en nuestros países los medicamentos de la frontera actual, los medicamentos biotecnológicos, inmunobiológicos, relacionados con las enfermedades crónicas no transmisibles: hipertensión, diabetes, enfermedades cardiovasculares", explicó.

En segundo lugar, dijo Padilha, el foro BRICS debe transformarse en una articulación política de esos países para actuar de forma conjunta en el sendo de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

"Queremos coordinar para discutir la reforma de la OMS, estableciendo el papel de esos países en la dirección de la OMS, y fortaleciendo sus centros regionales", señaló.

Por otra parte, la expectativa es que el encuentro de Beijing defina una serie de instituciones de los países BRICS que puedan producir medicamentos para enfermedades de interés global, como malaria y SIDA, sobre todo para los continentes africano y asiático, y para América del Sur.

En ese sentido, dijo, buscan "construir una serie de instituciones que puedan contribuir con la evaluación de incorporación tecnológica en salud.

"Es fundamental que esos países tengan una red en la academia, en las instituciones de enseñanza, que contribuya con sus gobiernos para determinar cuáles son los productos de deben ser incorporados en los sistemas nacionales de salud de esos países", agregó.

Sobre la participación en la Asamblea General de la ONU, un punto fundamental de la posición de los grandes países que integran el BRICS será el acceso a medicamentos para la atención de Enfermedades Crónicas No Transmisibles.

Padilha recordó que todos esos países van a vivir un nuevo perfil epidemiológico para los cuales precisan prepararse rápidamente.

"Una posición de los países del BRICS muy clara y concreta es que la producción de medicamentos está sometida a los intereses de la salud pública. Las enfermedades no transmisibles preocupan cada vez más al mundo, por envejecimiento de la población, los nuevos hábitos urbanos, el aumento de la obesidad, cambio demográfico", señaló.

Entre las experiencias exitosas que el ministro brasileño presentará en Beijing será la construcción y resultados del Sistema Unico de Salud (SUS), sistema público aplicado en Brasil, que busca ofrecer atención básica universal de salud, desde el lugar donde las personas viven hasta los procedimientos de la más alta complejidad.

Para destacar los éxitos de este programa, Padilha mencionó que Brasil es el país que más transplantes públicos y gratuitos para su población hace en el mundo.

Al respecto, también mencionó experiencias exitosas como la del Programa Nacional de SIDA, la oferta de antivirales, el enfrentamiento de la malaria y la tuberculosis, entre otros. "Queremos mostrar e intercambiar experiencias", destacó.

Padilha manifestó además su entusiasmo con la posibilidad de visitar un hospital en que se aplica medicina tradicional china, que despierta en el país sudamericano un interés cada vez mayor.

La visita al hospital chino, dijo, "es casi como un sueño a ser realizado. Entender cómo el sistema chino combina medicina tradicional, con tanta fuerza cultural, científica, tecnológica. Brasil aprendió mucho con la incorporación de prácticas tradicionales como esa en nuestro sistema nacional de salud", afirmó. Fin