Con motivo de la Semana de la Cultura Tibetana en Roma, los italianos tienen la oportunidad única de descubrir los encantos de la región autónoma china del Tíbet sin moverse de su país, simplemente dándose una vuelta por el Parque de la Música de la capital italiana.

La Semana de la Cultura Tibetana se enmarca en el programa del Año de la Cultura China en Italia y ofrece una serie de exposiciones, representaciones artísticas, bailes tradicionales y seminarios sobre la cultura tibetana.

El evento "Tíbet, maravilla en el techo del mundo" es el primero de su tipo en Italia y sirve para conmemorar el 60º aniversario de la emancipación pacífica del Tíbet.

Constituye una muestra de lo mejor del universo tibetano, con cientos de asombrosas fotografías en las que se puede apreciar el paisaje nevado del altiplano, el azul nítido del cielo, el trabajo de los campesinos y la alegre vida social de las aldeas tibetanas.

Durante esta semana, los italianos pueden conocer las fiestas y tradiciones de la cultura tibetana, como el festival budista de Saga Dawa, que conmemora el nacimiento e iluminación de Buda; así como maravillarse con los coloridos trajes regionales, las bellas pinturas sobre seda (Thangka) y otras representaciones del arte tibetano.

Los visitantes también tienen la oportunidad de acercarse a los mágicos entornos naturales y la mística atmósfera de la región, y conocer la transformación que ha experimentado en los últimos años.

Algunos de los italianos que han visitado la exposición no han ocultado su impresión a la salida de la misma.

"Es impresionante. Siempre he soñado con ir allí, pero pensaba en el Tíbet como en otro mundo que estaba demasiado lejos para llegar a él. Me atemorizaban las diferencias culturales porque no sabía nada sobre ese territorio, pero ahora he adquirido conocimientos que me han dado el coraje de reservar un viaje para ir allí", explicó Roberta Dini, de 34 años, en declaraciones a Xinhua.

Su hijo Marco, de 12 años, señalaba con el dedo una fotografía en la que se podía ver la verde geografía montañosa de la región. "Mamá, llévame allí este verano, por favor", le dijo a su madre.

El propósito de esta exposición, cuya entrada es gratuita, es acercar el Tíbet a los italianos.

"Tuve la impresión de contemplar el paraíso, con esas coloridas pinturas y fotografías. Aprender sobre la religión popular me ha dado una clara idea de lo que es el Tíbet. (La exposición) ha estimulado mi apetito y estoy deseando ir allí", afirmó Remo Tarquini, de 60 años.

"Ahora entiendo que se diga que el Tíbet es un 'lugar del corazón'", añadió.