La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) destacó hoy la irrupción de China como uno de los principales países que más ha invertido en la región, al representar el año anterior 9 por ciento del total de los flujos de capital.
"En 2010 las empresas chinas invirtieron cerca de 15.000 millones de dólares en países latinoamericanos y caribeños, básicamente a través de fusiones y adquisiciones", señaló el organismo en el informe "La inversión extranjera directa (IED) en América Latina y el Caribe", presentado en la Ciudad de México.
Más de 90 por ciento de las inversiones chinas confirmadas en América Latina se han dirigido a la extracción de recursos naturales, agregó el organismo.
"A mediano plazo se espera que las empresas transnacionales de ese país sigan llegando a la región y que se diversifiquen hacia los sectores de infraestructura y manufacturas", agregó.
Al analizar los sectores de destino de la IED, la CEPAL alertó que los flujos están reforzando la especialización productiva de la región.
Este año la IED en la región crecerá entre 15 y 25 por ciento respecto a 2010, sin emabrgo aún deben aplicarse políticas focalizadas en la innovación para absorber mejor los beneficios de estos flujos de capitales, indicó el organismo de Naciones Unidas.
El año pasado América Latina y el Caribe fue la región donde más creció el porcentaje de recepción y emisión de IED en el mundo.
Los ingresos por este concepto aumentaron 40 por ciento respecto a 2009, al alcanzar 112.634 millones de dólares, mientras que los egresos casi se cuadriplicaron en el mismo período al totalizar una cifra histórica de 43.108 millones de dólares.
Esto pone de relieve el gran dinamismo de las empresas transnacionales latinoamericanas y caribeñas, conocidas como traslativas.
El informe fue presentado por la secretaria ejecutiva de la CEPAL, la mexicana Alicia Bárcena, y por el secretario (ministro) mexicano de Hacienda y Crédito Público, Ernesto Cordero.
En el documento se plantea que, en un contexto de caída de la inversión extranjera hacia los países desarrollados (menos 7 por ciento) y de aumento en los países en desarrollo (10 por ciento), la región de América Latina y el Caribe incrementó su participación como receptora de 5 a 10 por ciento de 2007 a 2010.
Para 2011 se espera que los flujos IED hacia la región mantengan la misma tendencia para aumentar entre 15 y 25 por ciento, con lo cual podrá alcanzarse un nuevo récord histórico.
Bárcena dijo que las cifras dan cuenta de la creciente inserción de América Latina y el Caribe en el proceso de globalización económica.
Según el informe, el mayor receptor de IED en la región fue Brasil, donde las entradas tuvieron un aumento récord de 87 por ciento, al pasar de 25.949 millones de dólares en 2009 a 48.462 millones de dólares en 2010.
El segundo país receptor fue México (17.726 millones de dólares), seguido de Chile (15.095 millones de dólares), Perú (7.328 millones de dólares), Colombia (6.760 millones de dólares) y Argentina (6.193 millones de dólares).
En América Central, las corrientes IED crecieron en todos los países, excepto en El Salvador (menos 79 por ciento), mientras que en el Caribe cayeron 18 por ciento.
México fue el país que realizó mayores inversiones en el exterior en 2010, por un monto de 12.694 millones de dólares.
Le siguieron Brasil (11.500 millones de dólares), Chile (8.744 millones de dólares) y Colombia (6.504 millones de dólares).
Como principal inversionista en la región está Estados Unidos, responsable del 17 por ciento de la IED recibida en 2010, seguido por los Países Bajos (13), China (9), Canadá y España (ambos con 4 por ciento).
En América del Sur, los sectores con mayor recepción en 2010 fueron recursos naturales (43 por ciento) y servicios (30 por ciento).
En comparación con el período 2005-2009 se observó un aumento del peso de los sectores primarios en las inversiones.
En México, América Central y el Caribe, las inversiones llegan principalmente a los sectores de manufacturas (54 por ciento) y servicios (41 por ciento).
La participación de América Latina y el Caribe como destino de inversiones con alto contenido tecnológico es aún reducida, en comparación con otras regiones, aunque existe un incremento de proyectos de IED en sectores de tecnología media-alta y asociados a investigación y desarrollo.
En América Central, Panamá y República Dominicana las transnacionales invierten para generar plataformas de exportación, sin embargo han variado los sectores de destino, al pasar de las manufacturas a los servicios, especialmente turismo, negocios inmobiliarios y servicios empresariales a distancia. Fin