El jefe de la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití (Minustah), Edmond Mulet, afirmó hoy que el trabajo de dicho organismo debe concentrarse en la creación de un Estado y en los problemas de orden jurídico del país.
"Haití carece de un catastro de tierras, por lo que cualquier alquiler de terrenos termina en una larga disputa; tampoco existen registros de nacimiento, de defunciones, ni tribunales de comercio", dijo el diplomático.
Este país caribeño se encuentra en pleno proceso de reconstrucción tras el devastador sismo del 12 de enero del 2010, que dejó un saldo de 222.570 personas y un millón 300.000 damnificados, de los cuales 800.000 viven aún en campamentos.
Las declaraciones de Mulet fueron publicadas hoy por el diario colombiano "El Tiempo", a propósito de las discusiones que se abrirán en abril próximo en el Consejo de Seguridad de la ONU sobre la reconstrucción de Haití.
Según el diplomático, el debate central en el Consejo de Seguridad gira en torno a las diferencias entre una misión de mantenimiento de paz y una dedicada a promover el desarrollo.
"Es necesario que el Consejo de Seguridad adapte los mandatos de cada una, para poder atender a un Estado fallido como el haitiano", agregó Mulet.
La Comisión Interina para la Reconstrucción de Haití (CIRH), organismo que desde agosto del 2010 administra la ayuda externa al país, dice que los daños causados por el desastre se estiman en 7.900 millones de dólares, un poco más del 120 por ciento del Producto Interno Bruto del 2009.
La Misión de la ONU para la Estabilización de Haití (Minustah) fue establecida el 1 de junio del 2004 por una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU.
El organismo sucedió a una Fuerza Multinacional Provisional autorizada por el organismo mundial en febrero de ese año, después de la partida al exilio del entonces presidente Jean Bertrand Aristide.
Mulet, quien fue elegido jefe de la Misión el 31 de marzo del año pasado, dijo que el Consejo de Seguridad debe entender que las condiciones cambian de país a país, por loq ue es importante adaptar sus mandatos.
El diplomático, de origen guatemalteco, sustituyó formalmente en el cargo al tunecino Hédi Annabi, quien pereció en el terremoto del 2010.
Mulet ya se había hecho cargo de la misión entre junio del 2006 y agosto del 2007, año en que fue elegido secretario general adjunto de la ONU para Operaciones de Paz.
Según su página de Internet, la Minustah contaba, hasta octubre del año pasado, con 11,797 efectivos uniformados (8,651 soldados y 3,146 policías), 470 funcionarios internacionales, 1,222 funcionarios nacionales y 226 voluntarios de la ONU en Haití.
Su presupuesto es de 380 millones de dólares y el componente militar está integrado por Argentina, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Ecuador, Estados Unidos, Filipinas, Francia, Guatemala, India, Japón, Jordania, Nepal, Perú, República de Corea, Sri Lanka y Uruguay. Fin