Unas 55.000 asambleas ciudadanas se han efectuado, hasta hoy en Cuba, y desde el 1 de diciembre, para debatir las transformaciones económicas y la "actualización del modelo socialista" impulsados por el presidente Raúl Castro.
Esta cifra, anunciada este viernes por el diario oficial Granma, representa un tercio de las reuniones previstas por el gobierno para discutir el documento que contiene ese plan de reformas.
Dicho texto es analizado en grupos de base del Partido Comunista (PCC) y de la Unión de Jóvenes Comunistas, así como en centros laborales, educativos y en organizaciones no gubernamentales de los barrios.
El plan de medidas incluye la ampliación del trabajo por cuenta propia hacia numerosos oficios, así como la eliminación de gratuidades y subsidios sociales "excesivos".
También se prevé la implantación de un nuevo esquema tributario y fiscal, además del cierre de puestos de trabajo innecesarios en el sector estatal, para reubicar al personal excedente en otras áreas, sobre todo en el sector productivo.
Según el vicepresidente cubano Esteban Lazo, este ha aportado "un enorme y rico caudal de argumentos para la necesaria e impostergable actualización del modelo socialista cubano".
Las reformas serán ratificadas en el VI Congreso del gobernante Partido Comunista, a celebrarse en abril próximo, para debatir ese plan de transformaciones económicas, el cual busca reactivar la economía cubana, afectada por el bloqueo estadounidense desde hace medio siglo, y por la crisis económica mundial. Fin