Según la policía local, en la madrugada del domingo, sobre la carretera federal Acapulco-Pinotepa Nacional, a la altura del puente Tunzingo, aparecieron tres cabezas humanas con el cuero cabelludo y la piel del rostro arrancados.
Dos de los cuerpos a los que pertenecían las cabezas fueron colgados del puente y el tercero se encontró a la orilla del río, todos con los brazos cercenados, precisa el informe.
“A simple vista”, añadieron fuentes del SSPPC, los cadáveres no presentaban ningún impacto de bala, lo que hace suponer que fueron decapitados vivos.
Las otras cuatro víctimas del narcotráfico en Guerrero fueron localizadas sobre la carretera federal Iguala-Chilpancingo, entre las comunidades de Sabana Grande y Tonalapa del Sur, en el municipio de Tepecoaucuilco.
En el caso de estos últimos, señala la nota del SSPPC, se trataba de hombres de entre 20 y 35 años de edad, que estaban maniatados y presentaban “múltiples impactos de proyectil de arma de fuego en diferentes partes del cuerpo, de calibre desconocido”.