Según Jaua en 10 de los 23 Estados del país se han suspendido todas las actividades escolares y universitarias durante esta semana, debido a la situación de emergencia presentada en todo el territorio norte, desde el oeste hasta el este.
La finalidad de esta medida, según el Gobierno, es "proteger" a los niños, "ayudar a descongestionar el tránsito", y "permitir a los equipos de rescate y vialidad desplazarse con mayor seguridad". Algunas de las zonas más afectadas son los cerros que bordean la capital, donde están asentadas miles de personas que viven en condiciones precarias.
En algunos sectores las aguas se han llevado estas precarias viviendas, arrastrando toneladas de piedras y escombros. Una veintena de escuelas han habilitado sus espacios para recibir a los damnificados, mientras que varios hoteles privados han cedido voluntariamente al Gobierno un total de 858 habitaciones para los afectados, ha informado a la prensa local el alcalde del municipio Libertador, Jorge Rodríguez.
Las lluvias han obligado al cierre intermitente del aeropuerto de Maiquetía, lo que ha causado el retraso y desvío de vuelos nacionales e internacionales hacia otras terminales del país, como el de la isla de Margarita.