De esta forma, China ha querido mostrar su compromiso y su solidaridad con el conjunto de los países en vías de desarrollo y marcar unos lazos de proximidad con los pueblos de esas naciones. La visita viene a añadirse a las inversiones que muchas empresas chinas ya realizan en esas zonas, en materia de energía, infraestructura y servicios financieros.
En el marco de estas políticas de solidaridad y ayuda a otras naciones en vías de desarrollo, China se ha comprometido también a establecer 100 escuelas rurales durante los próximos tres años y a ofrecer cada año 4 mil becas del Gobierno chino para estudiantes africanos, según informa la edición digital de Sydney Morning Herald.