Un tribunal federal de Riverside, en el estado de California, declaró este jueves que la política que ha venido aplicando el Ejército estadounidense respecto a la homosexualidad, vetando abiertamente de sus filas a los soldados con esa orientación sexual, es inconstitucional.

La jueza del Tribunal de Distrito Virginia A. Phillips dijo que pronto emitiría un interdicto para impedir que el gobierno aplique dicha política.

Phillips señaló que, contrariamente a lo que han argumentado muchos partidarios, la política de "no preguntar ni informar" no ha garantizado la preparación del Ejército. El enfoque ha tenido, de hecho, un "efecto directo y perjudicial" en el Ejército.

En una legislación adoptada en mayo, la Cámara de Representantes de Estados Unidos demandó al Pentágono que revocase dicha política si se demostraba, a través de un estudio que se estaba llevando a cabo, que el Ejército podía adaptarse al cambio sin que su preparación defensiva saliese perjudicada.

El presidente estadounidense Barack Obama también criticó vehemente la política restrictiva del Ejército respecto a la homosexualidad, considerándola una amenaza para la seguridad nacional.

El Departamento de Justicia de Estados Unidos, no obstante, ha defendido esa política en un juicio de dos semanas celebrado en el Tribunal de Distrito de Riverside. Aunque la jueza Phillips ha hecho esa recomendación, aún existe la oportunidad de apelar el fallo. Fin