El aspecto fundamental de las actuales conversaciones sobre el clima de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) es que los países desarrollados deben asumir las responsabilidades históricas, legales y morales por el cambio climático, indicó el lunes en esta ciudad el representante de China en dichas negociaciones.
En una entrevista exclusiva con Xinhua, Huang Huikang, representante especial del Ministerio de Relaciones Exteriores de China en las negociaciones sobre el cambio climático de la ONU, señaló que las naciones desarrolladas deben dejar de cambiar el foco de sus promesas y compromisos sobre el cambio climático.
"En los últimos 200 años, los países desarrollados han generado una gran acumulación de dióxido de carbono por su modo de producción y estilo de vida. La responsabilidad histórica está bastante clara al respecto", afirmó el representante chino.
Huang, al frente de la delegación china en el Grupo de Trabajo Especial sobre Compromisos Adicionales para las Partes del Anexo I, comprendido en el Protocolo de Kioto (AWG-KP, siglas en inglés), se encuentra en la ciudad alemana de Bonn para participar en la tercera ronda de las conversaciones sobre el clima de la ONU este año, que se celebra del 2 al 6 de agosto.
Huang apuntó que las actuales negociaciones sobre el clima sólo podrán avanzar en la dirección correcta si los países desarrollados lideran la reducción sustancial de emisiones de gases con efecto invernadero, alcanzando la meta de reducir las emisiones en un 40 por ciento en 2020 respecto a los niveles de 1990, propuesta por los científicos.
"Las expectativas de la comunidad internacional distan mucho de ser satisfactorias, pues las naciones industrializadas están lejos de alcanzar un objetivo incluso inferior al 40 por ciento", dijo Huang.
Además, los países desarrollados tienen la obligación de proporcionarle apoyo financiero y tecnológico adecuado y oportuno a las naciones más pobres, que son también las más vulnerables ante los desastres que pueda causar el cambio climático, añadió el representante especial de China.
Huang señaló que muchos de los países en vías de desarrollo, entre ellos China, han decidido adoptar acciones de alivio y adaptación "para hacer sus propias contribuciones a los esfuerzos destinados a hacer frente al cambio climático".
Reiteró, no obstante, que esos países se opondrán y rechazarán de manara categórica los intentos de ciertos países de confundir los recortes de emisiones independientes por parte de las naciones en vías de desarrollo con los recortes obligatorios de los países desarrollados.
"No se debe cambiar el enfoque, y tampoco eludir la responsabilidad histórica, legal y moral de los países desarrollados", subrayó Huang.
Con respecto a la reunión ministerial programada para diciembre en Cancún (Mexico), Huang confió en que las negociaciones puedan avanzar en "varias cuestiones importantes". No obstante, advirtió que "no se puede resolver el problema de una vez por todas en una sola sesión, pues las negociaciones siempre son una tarea ardua y de largo recorrido".
A la reunión de Bonn asistieron unos 4.500 representantes de gobiernos, empresas, organizaciones medioambientales e instituciones dedicadas a la investigación de unos 180 países. Los participantes debatirán sobre un nuevo texto de negociación y continuarán preparándose para la conferencia ministerial de Cancún.
Tras el encuentro de Bonn, la ciudad china de Tianjin acogerá en octubre la cuarta ronda de las negociaciones, la última cita antes de la reunión de diciembre.
"La iniciativa china de organizar la sesión refleja su sincera voluntad para actuar como parte responsable y constructiva en las negociaciones sobre el cambio climático. Actualmente se han completado los preparativos básicos de la reunión en cuanto a su estructura y organización, y China se esforzará por crear un buen ambiente y ofrecer servicios de calidad con la esperanza de que ese encuentro pueda contribuir a la cita de Cancún de manera significativa", concluyó Huang. Fin