Magistrados de vertiente sandinista se aprestan a controlar de manera total el Poder Judicial de Nicaragua, sin la presencia de sus colegas magistrados liberales en una sesión de Corte Plena prevista para el próximo lunes.  La Corte Suprema de Justicia de Nicaragua está integrada por ocho magistrados liberales e igual número de magistrados sandinistas, es decir, 16 miembros, una mayoría de los cuales integra la Corte Plena. La magistrada sandinista, Alba Luz Ramos, asumió en el curso de la semana la presidencia del Poder Judicial, luego de que el presidente del máximo órgano judicial, Manuel Martínez, dejara su cargo al alegar caducidad del período para el cual fue electo.  Tras asumir su cargo, la magistrada convocó nuevamente a Corte Plena para el próximo lunes 28, con el fin de tratar temas como la restructuración del poder Judicial, que incluye la elección de presidente, vicepresidente y miembros de cuatro salas judiciales: Penal, Constitucional, Contencioso Administrativo y Civil.  Ramos aseguró que seguirá convocando a Corte Plena, ya que los liberales "mantienen una dualidad al decir que se integraran a sus cargos y luego ausentarse por motivaciones políticas".  El pasado 24 de junio, magistrados liberales, todos miembros del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), que controla Arnoldo Alemán, dejaron plantados a sus colegas sandinistas en el en la Corte de Justicia, al no presentarse a la reunión de Corte Plena acordada en ese poder del Estado. Los magistrados liberales anunciaron en una carta que no se presentarían a la primera reunión de Corte Plena convocada para este viernes, pero tampoco aclararon si lo harán el próximo lunes. Mientras tanto la oposición política nacional alega que el país se encuentra en medio de un caos en el que reina la inseguridad jurídica que afecta el clima de los negocios y ahuyenta a la inversión extranjera y crea inestabilidad política nacional. Fin