El presidente de Guatemala, Alvaro Colom, pidió ayuda a la comunidad internacional para su país azotado por una erupción volcánica y el paso de la tormenta tropical "Agatha" en los últimos días.

Los dos fenómenos naturales dejaron muertos, desaparecidos y miles de damnificados, ríos desbordados, viviendas inundadas, derrumbes y deslaves que bloquearon carreteras y árboles derribados.

Durante una conferencia de prensa ofrecida anoche en el Centro de Operaciones de Emergencia, Colom dijo que la situación es muy seria y la calificó como tragedia nacional.

El presidente indicó que aunque el volcán de Pacaya, situado 45 kilómetros al sur de la capital de Guatemala, ha disminuido su actividad luego de la violenta erupción del pasado jueves, se le sigue vigilando porque en cualquier momento podría reactivarse.

Además, la gran cantidad de arena que el coloso arrojó en un radio de poco más de 200 kilómetros, ha causado serias dificultades porque cubrió la pista del aeropuerto internacional, carreteras, calles ymiles de viviendas.

Colom dijo que la prioridad es la de proteger a la población y lamentó la muerte de ocho personas debido a las copiosas lluvias que han caído sin cesar desde la noche del viernes.

La tormenta Agatha se degradó a depresión tropical, pero el presidente consideró que el cambio de categoría no significa que haya disminuido la intensidad de las lluvias porque la diferencia es solo en la fuerza de los vientos.

Colom informó haber solicitado la cooperación de los gobiernos de países amigos en el transporte aéreo, el envío de puentes provisionales tipo Bailey; colchonetas, cobijas y alimentoscomo arroz, maíz, fríjol y aceite.

El presidente dijo que se necesita todo lo indispensable para sostener los albergues destinados para los damnificados.

"Hasta ahora hemos atendido a los afectados con la erupción y las copiosas lluvias, pero la velocidad que lleva el proceso para refugiar a los desplazados de las zonas de riesgo es muy acelerada", agregó.

Durante la noche del sábado, Colom habló por teléfono con el presidente de México, Felipe Calderón, y con el presidente de El Salvador, Mauricio Funes, quienes le ofrecieron amplia solidaridad para el pueblo de Guatemala.

Calderón y Funes dispusieron que los aeropuertos de Tapachula en el sur de México y el de Comalapa en El Salvador, puedan servir como terminales aéreas alternas para recibir la ayuda internacional destinada a Guatemala.

Colom indicó que el aeropuerto internacional de la ciudad de Guatemala continuará cerrado varios días, porque debido a las lluvias se suspendió el retiro de la arena volcánica que cubre la pista de aterrizaje.

"Era tanta la lluvia que la poca arena que lográbamos quitar, la volvía a regresar el agua", aseguró el presidente.

El mandatario indicó que tan pronto mejoren las condiciones climáticas, se reiniciará el trabajo para remover el material volcánico del aeropuerto.

También informó que el presidente Funes está tratando de organizar un servicio de transporte terrestre de tipo pullman entre los dos países, para llevar a los pasajeros que no han podido ingresar o salir de Guatemala por la emergencia.

Colom dijo que por la tormenta en el Valle de Guatemala se han registrado 108 milímetros de lluvia, una nueva marca desde 1949.

Debido al paso de Agatha se han reportado múltiples emergencias en todo el territorio guatemalteco, particularmente en la zona sur, en la región occidental y en el norte de El Quiché. Fin